Tijuana, BC.

El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Baja California no ha podido explicar dónde quedó el cadáver de una recién nacida que el Servicio Médico Forense (Semefo) de Ensenada le hizo llegar a uno de sus velatorios.

La Subprocuraduría de Justicia del estado inició una averiguación previa por el delito de inhumación o exhumación irregular de cadáveres, para determinar el paradero del cuerpo de una bebé que nació luego de siete meses de gestación, pero no consiguió sobrevivir. En respuesta, la agencia del Ministerio Público tomó declaración a siete empleados del Semefo, del Hospital General y de los velatorios del DIF en Ensenada.

La denuncia formal fue presentada el pasado 31 de agosto por los familiares de la fallecida, quienes señalaron que no les había sido entregado el cuerpo en el Semefo –que depende del Tribunal Superior de Justicia del Estado– ni en el velatorio del DIF estatal.

Unos días antes, el 27 de agosto, el Hospital General notificó el fallecimiento, y representantes del Ministerio Público acudieron para dar fe del deceso. La información proporcionada por el personal médico del hospital señala que la bebé fue ingresada por paramédicos de la Cruz Roja el 25 de agosto; que pesaba 1.60 kilogramos, que su estado de salud era grave, por ser prematura y no sobrevivió.

Ese mismo día, el cuerpo fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para que se le realizara la necropsia. Posteriormente, el 29 de agosto, el Ministerio Público entregó a los familiares el oficio de liberación del cuerpo, pero éste no les fue entregado. El Semefo notificó que trasladó el cuerpo a los velatorios del DIF, y después nadie ha podido dar con él.

(Con información de Javier Cruz y Antonio Heras)