Denuncian pormenores de los que se valen funcionarios para favorecer a proveedores
En agosto terminó licitación pública mixta para la adquisición de ropa quirúrgica desechable con un sobrecosto de 12 millones de pesos, señala Raúl Navarro, director de Proarta
Lunes 7 de septiembre de 2015, p. 42
Las irregularidades en las compras de insumos en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) persisten. Las acciones para garantizar la transparencia y las mejores condiciones posibles para el organismo no han funcionado. En agosto pasado concluyó la licitación pública mixta para la adquisición de ropa quirúrgica desechable, pero con un sobrecosto de alrededor de 12 millones de pesos, denunció Raúl Navarro, director de la empresa Proarta.
De nada sirve que las empresas interesadas en vender algún insumo al Issste asistan y cumplan con los requisitos que se establecen en la convocatoria si al final descalifican a los aspirantes con argumentos carentes de sustento, señaló.
En entrevista, Navarro dio cuenta de los pormenores del proceso y las argucias
de que se valen los funcionarios de la Dirección de Administración, la Subdirección de Infraestructura y otras áreas del Issste involucradas en las compras para favorecer a ciertos proveedores, aunque ello implique un desembolso mayor en perjuicio de las finanzas institucionales.
El pasado mes de julio, el instituto emitió la convocatoria a la licitación LA-019GYN013-N18-2015 sobre 13 claves de ropa desechable para hospitales. Determinó requisitos de material como tipo y características de la tela (no tejida grado médico, de polipropileno, 100 por ciento impermeable y repelente a la penetración de líquidos y fluidos.
En el caso de prendas como las batas para pacientes, el instituto también señaló características y medidas de la confección como la distancia que debe haber entre los adhesivos respecto de la orilla de la tela, el largo y distancia entre las cintas de amarre.
Es claro, señaló Navarro, que los participantes se aseguran de cumplir con las especificaciones y, en el caso de Proarta, contrató los servicios de Vigap, sociedad anónima que cuenta con la acreditación de calidad ISO 9000 y la certificación (reconocimiento) de la Administración de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).
Vigap fabrica las batas de protección para prevenir la transmisión del ébola en África occidental. Navarro comentó que el corporativo mexicano está asociado con la estadounidense Dupont para este fin y también se encargó de la confección de las prendas que se ofrecieron al Issste. Pretender que los productos no cumplen con los requisitos fijados por norma y establecidos en la convocatoria del Issste es inaceptable
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Señaló que la licitación transcurrió sin complicaciones, incluso hasta la presentación de las ofertas económicas. Proarta ofreció los precios más bajos en varias de las claves. Sólo faltaba la revisión de las especificaciones de confección.
Ahí surgieron las complicaciones, porque el Issste determinó que dicha revisión la realizaría en privado, con personal del Departamento de Recursos para la Operación y de Servicios del Sistema de Control y Regulación del Abasto, y sin la posibilidad de que los proveedores pudieran, por lo menos, observar las condiciones de la inspección.
Los participantes en el concurso desconocen cómo se hizo la revisión de las prendas, pero Raúl Navarro asegura que hay corrupción
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