Los 12 guerreros han tenido un aliado importante para rehacerse cuando parecían caídos: el aficionado 13, el público, comentó Horacio de la Vega, titular del Instituto del Deporte de la Ciudad de México, en alusión a la selección mexicana de basquetbol que busca su pase a los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Con una sola derrota en el Campeonato de las Américas FIBA 2015, la quinteta anfitriona ha dado alegría a la numerosa afición que noche a noche acude al Palacio de los Deportes, expuso el directivo, quien está orgulloso de la actuación de los tricolores, por lo que espera que este viernes logren su boleto a la justa veraniega.

No se habría alcanzado el impacto que está teniendo este campeonato si no hubiéramos tenido a estos 12 guerreros que han logrado grandes resultados deportivos que nos ponen los pelos de punta. Fue impresionante lo que ayer (miércoles) hizo (Gustavo) Ayón, por lo que abriremos todas las secciones del domo de cobre para tener nuevo récord de asistencia, cercano a los 19 mil espectadores, agregó.

Destacó que se ha puesto especial cuidado en la parte de la organización del certamen de la FIBA, inclusive en el boletaje para vender económicas las entradas –20 y 40 pesos– para que el público acuda en familia, con menores de edad gratis.

Admitió que la reventa es una situación que por desgracia no ha podido erradicarse totalmente, por lo que ya solicitó su intervención a otras áreas del Gobierno de la Ciudad de México para que ayude a resolver este problema, aunque le tranquiliza tener datos de que un alto porcentaje de las entradas ha sido comprado de forma normal.

Con insistencia en que esta ciudad se ha ganado el calificativo de capital del deporte, como en reiteradas ocasiones lo ha comentado el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, anticipó que en los días de competencia que restan se redoblarán esfuerzos para evitar la reventa, dada la gran expectativa generada por el equipo nacional.

Los aficionados estaban ávidos de este tipo de eventos deportivos, porque se han volcado y han apoyado a su equipo. De no haber sido por ellos, que ayer no dejaron escuchar a los argentinos las indicaciones que trataban de enviarse entre ellos, quién sabe qué habría pasado, comentó De la Vega.