Nueva York.

El ex receptor Yogi Berra, legendaria figura de los Yanquis de Nueva York de Grandes Ligas, amado por sus dichos y por su legendaria carrera en el beisbol, murió a los 90 años.

Muchos mensajes del mundo deportivo y más allá llegaron para el miembro del Salón de la Fama y tres veces jugador más valioso, querido por todos.

Realizó su vida con integridad inquebrantable, humildad y buen humor contagioso que lo elevó de leyenda del beisbol hasta ícono nacional amado, dijo en un comunicado el Museo de Yogi Berra.

El finado beisbolista jugó la Serie Mundial en 14 ocasiones, de las cuales conquistó 10 títulos, lo que aún constituye un récord en las Grandes Ligas. Además, fue nombrado tres veces el jugador más valioso.

El 10 veces campeón de la Serie Mundial con Nueva York fue ingresado al Salón de la Fama en 1972. Su ex novena retiró su jersey con el número ocho.

“Estamos profundamente entristecidos por la pérdida de una leyenda de los Yanquis y héroe estadunidense Yogi Berra. Hemos perdido a un ícono”, publicó el equipo en Twitter.

Los miembros del conjunto llevaron el número ocho en las mangas del uniforme en el partido de ayer contra los Azulejos de Toronto, en Canadá.

Berra dirigió a los Yanquis en la Serie Mundial de 1964 y a los Mets en la de 1973.

Era conocido por hacer lo correcto y por su tolerancia a los demás, como cuando se hizo amigo de Elston Howard, primer jugador negro de los Yanquis, en 1955.

En 2013 Berra también se convirtió en embajador de Athlete Ally, organización sin fines de lucro dedicada a la lucha contra la homofobia y la transfobia en el deporte.

Cuando fue incluido en el Salón de la Fama, dijo: Quiero dar las gracias al beisbol, que me ha dado más de lo que jamás hubiera esperado.

Algunas de sus frases: Esto no se acaba hasta que se acaba, El beisbol es 90 por ciento mental, la otra mitad es física, Nunca dije muchas de las cosas que dije, Si no sabes adónde vas, puedes terminar en otro sitio.