La llamada
luna sangrantese debe a un fenómeno luminoso, por la refracción de los rayos solares que atraviesan la atmósfera. Arriba, una imagen proporcionada por la Nasa que muestra a la Luna, a la izquierda, y a la Tierra, parte superior, en tránsito por el Sol, visto desde el Observatorio de Dinámica Solar Foto Ap
El mitológico, simbólico y extraordinario fenómeno no volverá a suceder hasta 2033
El astro estará en su punto más cercano a la Tierra, por lo que parecerá 14% más grande y 30 más luminosa
No hay nada que temer, sólo hay que sacar la cabeza y disfrutarla
: astrónomos
Afp
De la Redacción