Miércoles 30 de septiembre de 2015, p. 36
Con una población de 5.4 millones de habitantes y una extensión territorial de 338 mil kilómetros cuadrados, que lo ubica como el sexto país más grande de Europa, Finlandia es una de las economías más competitivas del mundo, pese a que sólo 8 por ciento de su territorio es tierra cultivable y 65 por ciento está cubierto de bosque.
Sin embargo, tiene uno de los climas más severos del planeta. Ubicado en la misma latitud que Groenlandia o Siberia, el segundo país más septentrional del mundo –casi una cuarta parte de su superficie se ubica en el Círculo Polar Ártico–, enfrenta temperaturas congelantes en invierno y una media de 10 grados en verano.
En otoño, cuando pueden observarse las auroras boreales, la temperatura se mantiene por debajo de los 10 grados, y en invierno es posible vivir la noche ártica al norte del Círculo Polar. Durante 51 días el sol nunca se eleva por el horizonte, mientras que en el sur del territorio sólo se tienen seis horas de luz.
Finlandia, miembro de la Unión Europea desde 1995, también enfrenta desde 2008 los efectos de la crisis económica con una tasa de desempleo de 10.3 por ciento y una deuda pública que ha crecido hasta llegar a 59.3 por ciento del producto interno bruto.
Pese a ello, Finlandia se encuentra entre los países con mejor calidad de vida para sus habitantes, con un producto interno bruto per cápita de 47 mil 129 dólares, frente a 10 mil 630 de los mexicanos. La esperanza de vida de las mujeres alcanza 82.3 años y 75 para los varones.