La ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación Elba Esther Gordillo Morales enfrenta una nueva acusación penal. Un juez federal libró una orden de aprehensión en su contra por ser presunta responsable de defraudación fiscal equiparable por más de 4 millones de pesos.

El Ministerio Público Federal (MPF) cumplimentó la orden de aprehensión en reclusión contra la ex dirigente magisterial, con lo cual suma tres acusaciones penales: dos por defraudación fiscal equiparable y otra por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

Gordillo fue detenida en febrero de 2013 en el Aeropuerto Internacional de Toluca y puesta a disposición de jueces federales con sede en los reclusorios Oriente y Sur.

La Procuraduría General de la República (PGR) dijo que, “de acuerdo con la indagatoria integrada por la Unidad Especializada en Investigación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita y Falsificación o Alteración de Moneda –adscrita a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido)–, en su declaración anual normal del impuesto sobre la renta (ISR), del ejercicio fiscal 2009, la inculpada consignó menos ingresos acumulables a los realmente obtenidos o determinados conforme a la ley vigente al momento de la comisión del delito”.

La indagatoria se inició por una querella presentada por la Procuraduría Fiscal de la Federación el 26 de septiembre de 2013; hechos por los cuales el Ministerio Público de la Federación ejerció acción penal por el delito previsto en el artículo 109, fracción I y sancionado por el 108, fracción III, del Código Fiscal de la Federación vigente en 2009, con la agravante prevista en el artículo 97 del mismo ordenamiento legal.

A partir del análisis de los ingresos reportados durante dicho ejercicio, señaló el MPF, se determinó, conforme a las leyes fiscales del mismo año, que la inculpada omitió el pago al fisco federal por concepto de impuesto sobre la renta, por 4 millones 394 mil 682 pesos.

En meses recientes Gordillo ha buscado que los jueces federales le autoricen enfrentar sus procesos en prisión domiciliaria, pero le han negado ese beneficio.