El gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez, y el mandatario electo, Héctor Astudillo Flores, recomendaron a los 81 alcaldes del estado, quienes rindieron protesta el 30 de septiembre, tomar precauciones en la designación de los secretarios de seguridad pública para evitar que los infiltre la delincuencia organizada.

Entrevistados en Chilpancingo, previamente a un acto de la iniciativa privada, Ortega Martínez sugirió a los munícipes que los aspirantes a esos cargos pasen los controles de certificación y acreditación, para que no se nos vaya a repetir un problema de penetración del crimen organizado como se dio en Iguala.

Héctor Astudillo, quien asumirá la gubernatura el 27 de octubre, reconoció que la violencia es lo que más le preocupa. La situación financiera tendrá que irse atendiendo de alguna manera, no así el de la inseguridad. En días recientes se han perpetrado más de 20 ejecuciones en diversos municipios de la entidad, entre ellos Atoyac de Álvarez y Chilpancingo.

A pregunta expresa de si el secretario de Seguridad Pública de Guerrero será designado de manera conjunta con el gobierno federal, respondió: Lo voy a definir con quien lo tenga que definir, es un asunto muy delicado.

El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, aseguró que su administración no sólo investigará a los directores de seguridad de los municipios de Carácuaro, Tiquicheo, Huetamo, Susupuato, Nocupétaro y San Lucas, sino que se realizará una revisión de las corporaciones de los 113 municipios, incluidos los que cuentan con elementos de Fuerza Ciudadana y Fuerza Rural, que han ido sustituyendo a los agentes municipales en unos 30 ayuntamientos.