Beirut.

Dos atentados suicidas provocaron al menos 41 muertos y cerca de 200 heridos este jueves en un bastión de Hezbolá, en la periferia sur de Beirut, en Líbano.

A última hora de la tarde, dos hombres hicieron estallar cinturones explosivos en un centro comercial del barrio Burj al Barajne. El ejército dijo haber encontrado muerto a un tercer terrorista que no pudo detonar su bomba. Se trata del peor ataque contra el movimiento chiíta desde que intervino en Siria en apoyo del régimen de Bashar al Assad, en 2013.

El ejército sirio, apoyado por el movimiento libanés Hezbolá y combatientes iraníes, se apoderaró este jueves de Al Hader, feudo de los insurgentes ubicado a unos 10 kilómetros de la carretera que une Alepo con Damasco, afirmó una fuente militar.

Las fuerzas kurdas iraquíes lanzaron este jueves una amplia ofensiva contra el grupo Estado Islámico (EI) para recuperar la ciudad norteña de Sinjar, ubicada en una ruta estratégica de aprovisionamiento de los yihadistas.

Sinjar está en una carretera que une Mosul –bastión de los yihadistas en el norte de Irak– con Siria, donde el EI controla igualmente vastos territorios. Cortar este eje, que permite al EI hacer circular material y hombres entre ambos países, constituiría un duro revés para los yihadistas.

El EI se apoderó de Sinjar en agosto de 2014 cometiendo atrocidades de todo tipo contra la minoría religiosa yazidí que vivía en la ciudad.

En tanto, cuatro hombres fueron arrestados en Gran Bretaña el pasado miércoles, sospechosos de pertenecer a un grupo kurdo sunita con vínculos con la red Al Qaeda en Europa.