Cientos de profesores se manifestaron ayer en al menos cuatro entidades para exigir la cancelación de la reforma educativa, que las autoridades garanticen seguridad para el magisterio y repudiar la evaluación punitiva.

En Acapulco, integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero marcharon para demandar mayor seguridad, luego de que al menos 48 planteles suspendieron clases o modificaron horarios durante la semana reciente debido a intentos de extorsión y secuestros.

Walter Emanuel Añorve Rodríguez, vocero, subrayó que la prueba destinada a Guerrero fue suspendida, aunque el gobierno diga que fue reprogramada para el 3, 4, 5 y 6 de diciembre. Agregó: Hay temor a perder nuestro empleo, pero es más grande el miedo a perder nuestra vida.

En El Espinal, Oaxaca, siete supervisores, ocho asesores técnicos, un jefe de sector, 45 directores y 45 subdirectores formaron el Frente de Directivos de Escuelas Secundarias Técnicas para rechazar el instituto estatal de educación pública, al que señalaron de convertirse en Ministerio Público y juez que persigue y pretende anular los derechos de los trabajadores.

En Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, miles de maestros de las secciones 7 y 40 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) marcharon e instalaron un plantón en el parque central para exigir la cancelación de la evaluación punitiva programada para este sábado y domingo.

En Hidalgo, medio millar de maestros del SNTE y la CNTE instalaron un plantón frente al palacio de gobierno en repudio a la evaluación.