La presidenta de la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, Araceli Damián González (del partido Morena), informó que en la Comisión de Hacienda se analiza posponer la discusión de la reforma que pretende convertir al Fondo Nacional de Pensiones de los Trabajadores al Servicio del Estado (Pensionissste) en una Afore que opere bajo el esquema privado.

Dijo que aunque nada garantiza que no se recurra a un albazo legislativo de PRI, PAN y PVEM, sería irresponsable por parte de esos partidos insistir en la desaparición de Pensionissste, sobre todo porque la mayoría de los maestros que actualmente están a evaluación tienen sus cuentas en ese fondo.

Sería otra forma de agredir a los trabajadores de la educación, indicó.

La legisladora explicó que el contenido de la iniciativa ha generado inquietud entre los sindicatos, pero también confusión sobre el destino de quienes se acogieron al artículo décimo transitorio de la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) de 1995 que dio paso a las cuentas individuales.

Ese artículo no se elimina, sólo se incluye a quienes están en cuentas individuales, dijo.

Recordó que en aquella reforma la apuesta del gobierno fue que la mayoría de quienes están inscritos en el Issste eligieran el sistema de cuentas individuales y se entregó un bono que reconocía la antigüedad, con la perspectiva de que los trabajadores lo trasladaran al ahorro para el retiro.

Sin embargo, se incluyó el artículo décimo transitorio como opción para permanecer en el sistema de reparto solidario, aunque casi 90 por ciento de los afiliados optó por permanecer en este régimen, porque las cuentas individuales son de más riesgo, y esto no es atribuible a Pensionissste. El esquema vigente sólo garantiza pensiones de 25 por ciento del último salario de cotización, detalló.

El problema de las bajas pensiones no se debe a las bajas cotizaciones, sino al modelo económico, que no genera empleos suficientes y salarios dignos, afirmó.

Entonces, si quieren aumentar la cuota de los trabajadores, primero tienen que incrementar el salario; de lo contrario, no podrán aportar más o padecerán mayor carencia.

Damián González aseguró que a este contexto se suma que, en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2016 se aplicó un recorte en atención a la salud y a la salud médica-hospitalaria, de 2 mil millones de pesos en el Issste.