Cultura
Ver día anteriorMiércoles 2 de diciembre de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
29 FIL de Guadalajara

El buen uso del lenguaje contiene mucha poesía, dice Wolf Wondratschek a La Jornada

Brilla en el encuentro editorial el Glenn Gould de las letras alemanas

Presentó en la perla tapatía la edición en español de su obra Cartas de Kelly

Esa privacidad epistolar se convirtió en algo público, sin cambiar nada, sin censura, comparte

 
Periódico La Jornada
Miércoles 2 de diciembre de 2015, p. 4

El escritor alemán Wolf Wondratschek (Rudolstadt, Turingia, 1943), considerado autor de culto en su país, se encuentra en México con la traducción al español de su novela Cartas de Kelly, publicada por el sello Herder.

Es un trabajo que ha deslumbrado a colegas como Patrick Süskind, quien en 1998, cuando el libro apareció en librerías germanas, escribió: “El tema del amor entre hombre y mujer, como es sabido, constituye el ámbito principal del poeta Wondratschek. Ahora él le dedica también un texto en prosa, y a mi parecer ha resultado el mejor que jamás haya escrito: enloquecido, monomaníaco, romántico hasta el límite con el kitsch (y a veces desbordando ese límite), y entre todo esto cómico y finalmente incluso también intrigante, y en algunos trechos tan bien trabajado lingüísticamente que queda atravesado por una maravillosa, casi despreocupada ligereza”.

Excesos y astucia

Cartas a Kelly (cuya primera edición en Alemania vendió en pocas semanas 10 mil ejemplares) reúne la correspondencia que Wondratschek intercambió con una amiga, sin la intención de publicarla.

Narra la historia de un escritor europeo que permanece varado en Nueva York, donde por una serie de excesos espirituales y físicos se metió en problemas, y con astucia logró que lo internaran en un manicomio.

Su único contacto con el mundo exterior durante meses son esas epístolas que escribe a su amada, quien se ha quedado en Europa, una tal Kelly, quien también le responde, pero en el libro lo que aparecen son facsímiles ilegibles (en realidad hojas caligrafiadas por la pintora Lilo Rinkens).

El escritor decidió un día mostrar esas cartas a un amigo sicoanalista, quien tuvo una reacción fulminante de entusiasmo. Convenció al autor de enseñar el texto a su editor, el que sin dudarlo le dijo que ese material debía convertirse en libro.

Fue así como esa privacidad epistolar se convirtió en algo público, por supuesto, sin cambiar nada, sin censura, explica Wondratschek en entrevista con La Jornada.

Retratista de la cotidianidad

Wolf Wondratschek, considerado en su país el Glenn Gould de la literatura alemana por la melódica filigrana de todos sus escritos, señala que “el buen uso del lenguaje siempre contiene gran cantidad de poesía o de elementos poéticos. El lenguaje que utiliza el personaje de Cartas de Kelly está exento de vergüenza o de timidez, pero es totalmente romántico, refleja el momento en el que un amante se pierde, se ausenta. Por eso el libro termina cuando la pareja se reúne”.

Foto
“El lenguaje que utiliza el personaje de Cartas de Kelly está exento de vergüenza o de timidez, pero es totalmente romántico, refleja el momento en el que un amante se pierde, se ausenta. Por eso el libro termina cuando la pareja se reúne”, explica el escritor Wolf Wondratschek a La JornadaFoto Carlos Ramos Mamahua

La traducción al español la realizó el mexicano Gonzalo Vélez, quien comenta que Cartas a Kelly “es un texto extraño por la manera en la que está construido; no es precisamente una novela. Fue un reto, pero el autor piensa mucho en sus lectores y su escritura fluye; a él lo quieren mucho por esa inmediatez, por ser tan directo. Espero que la traducción lo haya captado.

“Hubo algunos pasajes que me costaron un poco de trabajo por la manera tan coloquial de hablar y por sus juegos de palabras a lo largo del libro. Sin embargo, el personaje, que en mucho es un reflejo del autor, es un enamorado de la vida y de vivir tan desaforadamente que se va a un hospital siquiátrico para que no lo molesten y explayarse un poco.

“En ese sentido, Wolf es un gran retratista de la cotidianidad, como ya lo vimos en su novela pasada Mara, el primer libro que conocimos de él en español y que presentó en 2012 en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, en la cual narra la ‘vida’ de un cello Stradivarius.

Wondratschek se dio a conocer en los años 70 del siglo pasado como un poeta marginal; fue el niño terrible de la literatura alemana, pues era la época en que ser joven era demostrar rebeldía y él se perdía en los barrios de Munich; sólo aparecía cuando publicaba sus poemas. Desde el principio siempre tuvo mucho éxito; las ediciones se agotaban de inmediato, es un autor que marcó mucho a toda una generación.

Cartas de Kelly, de Wolf Wondratschek, es el primer título de la colección Alemán insospechado de Herder (editorial que dirige Jan Cornelius Schulz), la cual pretende sacar a la luz autores alemanes poco conocidos en español, pero que significan satisfactorias sorpresas, como en el caso de esta novela, comentó el editor.

El libro fue presentado el pasado lunes en la FIL de Guadalajara y circula en librerías mexicanas.