Lunes 14 de diciembre de 2015, p. 36
Cancún, QR.
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) solicitó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) cancelar la construcción del hotel Punta Jade, en el municipio de Tulum, porque pone en riesgo 11 especies animales protegidas, así como manglares, e incumple disposiciones legales.
El organismo pidió negar la autorización de impacto ambiental porque el proyecto está a 61 metros de vegetación, lo que contraviene normas oficiales mexicanas y convenios internacionales. Además, pone en riesgo especies que habitan o arriban para anidar y que no han sido consideradas en la evaluación de impacto.
El proyecto, ubicado en Bahía Príncipe, a 20 kilómetros del centro de Tulum, fue rechazado originalmente por incluir demasiadas habitaciones, y aunque el caso está en litigio, los promoventes ingresaron otras dos manifestaciones de impacto ambiental, que no procederán hasta que se resuelva el juicio 587/12-20-01-6.
De acuerdo con la organización no gubernamental, el proyecto amenazaría ejemplares de iguana gris, chara yucateca, cenzonte tropical, zanate, vireo manglero, tebeo menor, garza blanca, pato real y tres especies de tortuga: laúd, blanca y caguama.
En cuanto al programa de ordenamiento ecológico del corredor Cancún-Tulum, señala que contraviene diversas disposiciones, entre ellas el número máximo de cuartos: 401, cuando sólo se permiten 200 por desarrollo.
De igual forma, carece de estudio de cargas y geohidrológico del sistema kárstico para construir 12 edificios de departamentos y una alberca sin obstruir la circulación del agua subterránea entre el humedal y el mar.
Tampoco aclara qué destino tendrán las aguas tratadas y se planea desmontar 2.57 hectáreas de cubierta vegetal, 19.1 por ciento del total, cuando el límite es de 15 por ciento, según la Ley General de Vida Silvestre y la norma oficial mexicana 22 de la Semarnat.
También existe preocupación por la alberca, pues se pretende construirla a menos de 50 metros de un cenote, lo que podría afectar la estructura de la cueva y viola la norma que prohíbe alterar drenajes en zonas inundables, concluyó el Cemda.