La Oficina Ecuménica por la Paz y la Justicia aseveró que el servicio exterior alemán asumió una actitud dócil ante sus pares mexicanos, quienes exigieron postergar un encuentro de funcionarios de esa nación europea con el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), el cual investiga el caso de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, Guerrero, desaparecidos en septiembre de 2014.

Lo que hasta hace dos días todos y todas dábamos por hecho, se ha esfumado; da vergüenza ajena ver cómo el ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania se arrodilla ante sus pares mexicanos, expresó Daniel Tapia Montejo, encargado para México de esa agrupación.

En un comunicado, la organización dijo que el Ministerio de Exteriores alemán invitó a una delegación del GIEI a presentar su informe de trabajo en Berlín.

Hace pocos días, (Rüdiger) Lotz, encargado para asuntos bilaterales con México, Centroamérica y el Caribe, del Ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania, confirmó la invitación.

Cuando el GIEI, añade, informó al gobierno mexicano de la invitación a Berlín, “se desplegó una caballería para impedirlo. Fue así que exigieron a sus pares de Berlín ‘postergar’ la comparecencia del grupo de expertos hasta que estos hayan presentado su informe final (el cual se espera para abril), argumentando que es el gobierno mexicano el que invitó al grupo y lo financia. Esta exigencia fue aceptada por la diplomacia alemana sin precisar una nueva fecha para la reunión.

“Esta actitud es sumamente preocupante, pues abona a una forma de ‘berrinche diplomático’ del servicio exterior mexicano, que al parecer se ha vuelto norma”, indica la Oficina Ecuménica al citar otros casos de escasez o nula información de asuntos relacionados con los derechos humanos.

Dijo que para el gobierno alemán los puntos fundamentales de la relación con México no son los derechos humanos sino los intereses comerciales.