La Cruzada Nacional contra el Hambre ha dado resultados alentadores y se ha fortalecido, señaló, José Antonio Meade Kuribreña, titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol). Aún es la estrategia insignia en política social del gobierno federal, aseveró, y este año atenderá a alrededor de 7 millones de mexicanos en todo el país.

En entrevista, rechazó que la estrategia se haya desdibujado desde su llegada a la dependencia, hace casi cinco meses. Donde la cruzada hacía algo, ha sido relanzada y fortalecida. El mecanismo de espacio y diálogo que procura ha sido fortalecido para que sea donde se revise la estrategia de inclusión social y sus avances.

El presidente Enrique Peña Nieto puso en marcha la Cruzada el 21 de enero de 2013, cuando se publicó el decreto del Sistema Nacional para la Cruzada contra el Hambre y la Pobreza Extrema- en Zinacantán, Chiapas, donde aún nueve de cada 10 personas son pobres y la pobreza extrema se redujo, al pasar de 64.8 a 54.3, entre 2012 y 2014, de acuerdo con la medición que en 2015 presentó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

No obstante, el consejo reportó que, a escala nacional, en los primeros dos años del gobierno actual la pobreza se elevó en 2 millones de personas, al pasar de 53.3 millones (45.5 por ciento de la población) a 55.3 millones (46.2), y la pobreza extrema disminuyó en apenas 100 mil individuos, al pasar de 11.5 millones a 11.4 millones.

La cruzada implica que nos sentemos a la mesa y dialoguemos. No sólo sigue siendo insignia, a ella estamos obligados. Lo seguiremos haciendo, en la convicción de que es un espacio de diálogo valioso, que da resultados importantes; éstos se acreditan y pensamos que se debe seguir utilizando cada vez más, apuntó Meade Kuribreña.

El objetivo inicial de la estrategia fue atender a 7.4 millones de personas que al mismo tiempo vivían con carencia alimentaria y pobreza extrema en 400 municipios del país, pero a partir de este año se extenderá a todo el territorio nacional.

Se ha buscado identificar en todo el país a la población para hacer llegar algunos de los beneficios de los 90 programas incluidos en la estrategia. Esperamos identificar a más de 7 millones y llegaremos a 7.1 millones o más, dijo el funcionario.

La estrategia se ha fortalecido, agregó, pues estados que no habían firmado el Convenio Sin Hambre, ya lo hicieron; ha habido dos reuniones intersecretariales en cinco meses; se dio el primer encuentro con secretarios de Desarrollo Social y delegados; hemos tenido múltiples encuentros.

Recordó que como eje rector la estrategia utiliza los mecanismos de diálogo entre las dependencias federales y con los estados.

La primera evaluación de la cruzada que hizo el Coneval, consideró, dejó resultados bastante alentadores, en particular en los municipios que se designaron: Guachochi, Mártir de Cuilapan, Tehuacán, San Felipe del Progreso y Zinacantán, donde bajaron las carencias alimentaria y de acceso a servicios de salud; mejoraron calidad y espacios en vivienda, así como los servicios relacionados con ella.