Juchitán, Oax.

Organizaciones civiles encabezadas por el Centro de Derechos Humanos Tepeyac (CDHT), que dirige el obispo emérito de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes, y el Comité Regional de Defensa de los Chimalapas (CRDC), a cargo de Miguel Ángel García, partieron en caravana con ayuda humanitaria para la comunidad de San Francisco la Paz, que pertenece a Santa María Chimalapa.

Un total de 11 camionetas cargadas de alimentos, medicamentos y ropa fue la colecta realizada en parroquias del Istmo, la cual se entregó a los comuneros, que viven un conflicto social de límites territoriales y de invasiones con habitantes de Chiapas.

Desde hace 20 años se disputan 56 mil hectáreas, las cuales se encuentran invadidas por ganaderos de esa entidad, por lo que comuneros zoques no han podido cosechar maíz, chile y frijol.

“No hay comida para los comuneros y sus familias, viven amenazados y en crisis; propusimos una colecta de víveres, ropa y medicamentos y lo aceptaron.

Por fortuna hubo mucha respuesta en todas capillas y centros de acopio habilitados, estamos contentos porque nuestros hermanos podrán subsistir unos días con estas donaciones, explicó Miguel Ángel García, representante regional del CRDC.

Marcelino Nolasco Martínez, integrante del CDHT, puntualizó que el problema de la alimentación se vive a diario, por lo que es necesario que las autoridades diseñen estrategias para construir la paz de la localidad, la cual depende de la rapidez con el desalojo de los cuatro predios invadidos por chiapanecos (Emmanuel 1 y 2, La Gloria y Palomilla) y que pertenecen a San Francisco la Paz.

Exhortamos a las autoridades a que respondan para desalojarlos, nos dijeron que sería en 10 días, y han pasado 20 y no vemos claro; también están en alerta dos congregaciones que pertenecen a San Miguel Chimalapa: Benito Juárez y la Libertad, expresaron.

Dos visitadores adjuntos de la Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca acompañaron la caravana para atestiguar las necesidades de la comunidad zoque-chatina. Pedro Sandoval, visitador adjunto dijo que se verificará que no se violen los derechos humanos de los habitantes, además de que los Servicios de Salud de Oaxaca aceptaron abastecer medicinas e insumos.

Al convoy se unieron organizaciones civiles de Juchitán, San Dionisio del Mar, Red de Defensores Comunitarios de Oaxaca y la preparatoria José Martí de San Francisco Ixhuatán.