La subsecretaria para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Socorro Flores, confió ayer en que el connacional Gustavo Castro, testigo del homicidio de la activista Berta Cáceres, pueda regresar a México lo antes posible.

Recordó que en varias oportunidades se ha pedido al gobierno de Honduras que permita al ambientalista mexicano retornar al país, desde donde puede seguir colaborando con las autoridades de aquella nación en la investigación del asesinato.

La funcionaria señaló que ayer estuvo en contacto con la cancillería del país centroamericano y se encuentra a la espera de una respuesta formal a las solicitudes planteadas.

Confiamos en las garantías que nos han dado las autoridades hondureñas de que la investigación está siendo totalmente abierta y transparente, y se van a valorar y responder lo antes posible los planteamientos que ha hecho México. Confiamos en que Gustavo pueda regresar pronto al país. Queremos que sea lo antes posible, subrayó.

Flores Liera fue entrevistada luego que el ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Guillaume Long, celebró el anuncio de que el gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional iniciarán negociaciones de paz públicas para resolver el conflicto armado que aqueja al país sudamericano desde hace cinco décadas.

La embajadora también externó el beneplácito del gobierno mexicano por la creación de una mesa de conversaciones, que se llevará a cabo en Ecuador.

Añadió que México es más que un observador del proceso de paz, aunque no está involucrado en el diálogo. Manifestó que el gobierno de Enrique Peña Nieto alienta a las partes a continuar trabajando para alcanzar la pacificación de Colombia.

El ministro Long recordó que los países garantes de las negociaciones son Brasil, Ecuador, Noruega y Venezuela, mientras que los acompañantes son Cuba y Chile.

De visita en la Ciudad de México, destacó que se requiere mucha paciencia y voluntad política para solucionar el diferendo en Colombia y no sólo de los involucrados en el conflicto, sino de todos países de la región y de Latinoamérica.

Relató que la etapa privada de las conversaciones se inició hace dos años, durante las cuales se acordó la hoja de ruta y la metodología de la siguiente fase del diálogo.