Derrota la corrupción a la ley anticorrupción
Mariguana con receta
Mujeres se rebelan: #miprimeracoso
Duro informe del GIEI
El Estado supo y oculta
EPN: Photoshop y Twitter
En el Claustro:No se vayan
Con don Primo, de la trova a la redova
Ese viejo compañero de la facultad
Soberón: datos, fechas... fantasías
Futuro en suspenso
Mexichem: ¡al ladrón!
Pemex: ni un rescate más
Pajaritos: Lozoya firmó
América Latina. PIB y fiscalidad (1/2)
El gran escape
Independientes, entre la desventaja y las zancadillas
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La importancia del Barcelona
Jazztival embestido
n vísperas de la terminación de su estancia en México por decisión del gobierno mexicano, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) dio a conocer su segundo informe, Avances y nuevas conclusiones sobre la investigación, búsqueda y atención a las víctimas, sobre la agresión perpetrada en Iguala el 26 de septiembre de 2014 en contra de estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa y de otras personas. Esa instancia de coadyuvancia fue creada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en acuerdo con autoridades nacionales y los familiares de los 43 muchachos desaparecidos aquella noche, e inició su tarea en marzo del año pasado, cuatro meses después de que la Procuraduría General de la república (PGR), encabezada entonces por Jesús Murillo Karam, presentó una versión de los hechos según la cual los normalistas habían sido ejecutados e incinerados en el basurero de Cocula, y sus restos, triturados, colocados en bolsas de plástico y arrojados al aledaño río San Juan. Tal versión fue elevada en enero de 2015 a rango de verdad histórica
, pese a sus múltiples inconsistencias y contradicciones y a las críticas de que fue objeto por especialistas y organizaciones de derechos humanos.
Agradecen a integrantes del GIEI, compañeros de camino
ueridos compas, camaradas y compañeros: Gracias por estar, por decir y por nombrar, a pesar de todo...!!! Seguiremos buscando a nuestros queridos futuros maestros y ustedes serán compañeros de camino.
l Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) volvió a hacer trizas la verdad histórica
del ex procurador general de la República Jesús Murillo Karam sobre los hechos de Iguala y exhibió al jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, Tomás Zerón de Lucio, como pieza clave en los intentos por desviar el caso hacia una quinta versión
que no está sustentada en el expediente y también en la tácita siembra de una bolsa con restos óseos en el río San Juan, que, a la postre, mediante el análisis del ADN nuclear, se pudieron identificar en los laboratorios de genética de la Universidad de Innsbruck como pertenecientes a Alexander Mora, el único estudiante reconocido hasta ahora de los 43 detenidos/desaparecidos.
o exageran la doctora Lilia Albert y la socióloga y ambientalista Marisa Jacott al afirmar, en el libro que recientemente publicaron (México tóxico, Siglo XXI editores), que nuestro país carece de una efectiva política de protección civil. Que hay descoordinación de las autoridades cuando ocurre una emergencia química y no están preparadas para dar una explicación lógica y oportuna a las familias de quienes mueren o resultan heridos. Esto lo demuestra la sucedida el miércoles pasado en el complejo petroquímico de Pajaritos, Coatzacoalcos. Se intentó acallar la protesta de las familias con un cordón militar y policial; tampoco hubo capacidad para atender debidamente a los heridos. Todo eso enfureció a la gente que apedreó y abucheó a los líderes del corrupto sindicato petrolero. Agreguemos la falta de solidaridad humana del socio mayoritario de la empresa (el otro es Pemex): la familia del banquero Antonio del Valle, a quien le vendió el gobierno a precio de ganga parte de la planta petroquímica de Vinilo, donde ocurrió la explosión. Brilló por su ausencia luego de la tragedia.
a decisión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de dar por concluido el mandato del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) abre una oportunidad de oro para retomar el camino de la movilización social y la organización política.
e vez en cuando conseguimos sacar a un compañero de la cárcel, detener las máquinas que vienen a destruir un pueblo, frenar un megaproyecto, impedir un despojo… Recurrir a la ley, a los procedimientos jurídicos, todavía produce resultados. Pero esa no debe ser la única razón para seguirlos empleando, con toda necedad.
na de las frases más recordadas de J. M. Keynes se refiere a lo que dijo con respecto a que los hombres prácticos que creen estar exentos de cualquier influencia intelectual usualmente son esclavos de algún economista difunto
. Ciertamente esto le ha ocurrido a él, siendo, a 70 años de su muerte, una influencia mayor en la forma en que se piensa la economía y sus repercusiones políticas.
ace unos días buscaba el calor que se fue de nuestra ciudad y lo encontré en una carpeta de dibujos en la que Frederick Catherwood nos develó la vida infinita de la cultura maya. Pintó para preservar hasta nosotros su sueño colectivo. Tenía 40 años cuando se inició en el conocimiento del universo de los mayas. Había nacido en 1799 en Hoxton, suburbio de Londres y, desde 1821, visitó y dibujó las más importantes ciudades antiguas. Desde Jerusalén a Tebas, desde Roma hasta Karnak, todos los detalles pasaron por sus ojos.
l siglo XX musical, tan amplio que ya no sabemos cómo clasificarlo, debe a los afrodescendientes de Estados Unidos no sólo todo lo que el jazz y el blues significan. De la negritud salieron cuatro músicos absolutos y definitorios, a quienes nadie pudo impedirles tocar, componer, organizar y vender su incesante creación en arrogante e irritante libertad: Duke Ellington, Miles Davis, Jimi Hendrix, Prince. Cada uno en su instrumento fue virtuoso impar. Nunca retrocedieron, nunca dejaron de evolucionar, de transformarse. Sólo Hendrix murió muy pronto, y su huella se interrumpe. La traían, se organizaban sus bandas, orquestas, quintetos, cuartetos, tríos necesarios. Peleaban con sus patrones blancos, perdían. Y siempre salieron ganando. Sabían lo que querían, con esa fijeza de Mozart, una disciplina sobrehumana y la música por dentro.