Chihuahua, Chih., El traslado de Joaquín Guzmán Loera al penal federal número 9 de Ciudad Juárez fue pretexto para que la figura del narcotraficante irrumpiera en las campañas electorales por la gubernatura. El Partido Acción Nacional aseguró que el candidato del Partido Revolucionario Institucional, Enrique Serrano, y los gobiernos estatal y federal usan la fama de El Chapo para crear la percepción de que Chihuahua es un estado seguro, capaz de albergar a uno de los criminales más peligrosos del mundo. El líder del Partido Acción Nacional en el estado, José Luévano, sostuvo que mientras el gobernador César Duarte afirma que el traslado de Guzmán Loera a Juárez es un signo de la confianza que se tiene en las instituciones del estado, oculta el hecho de que precisamente este centro fue señalado recientemente por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos como uno de los peores del país. De esa cárcel, que no es de máxima seguridad, en marzo pasado se fugaron cinco reos, dijo el panista.