Domingo 22 de mayo de 2016, p. 13
En el contexto de la iniciativa presentada por el presidente Enrique Peña Nieto sobre bodas igualitarias, el cardenal Norberto Rivera Carrera aseveró que el matrimonio tiene un carácter sacramental desde el principio
y cualquier otra unión no tiene similitud, ni remotamente, con el matrimonio
, como señaló el papa Francisco en su exhortación apostólica Amoris laetitia.
Al celebrar una misa en la parroquia dedicada a los santos Juan Pablo II y Tomás Moro, en la colonia Florida, con motivo de la develación de una escultura del pontífice polaco, Rivera Carrera aseguró que nadie le puede enmendar la plana al Creador en cuanto a su proyecto de vida y de salvación
.
Durante su homilía, el cardenal no hizo referencia directa a la iniciativa de reforma del Ejecutivo federal ni mencionó a la comunidad de la diversidad sexual. No obstante, al igual que la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), hizo hincapié en el respeto de los derechos civiles de las personas y de la dignidad humana, y afirmó que en todos los casos se debe evitar la discriminación, aún entre las personas que han decidido seguir un camino diferente al que marcó Cristo.
Nula presión de la Iglesia
Por otra parte, Jaime Laines Potisek, teólogo del Centro Antonio Montesinos, declaró a La Jornada que aunque ya pasaron los tiempos en que la opinión de la Iglesia católica podía inclinar la balanza en temas que iban contra la moral sexual que promueve este credo, es posible que integrantes de la jerarquía eclesiástica intenten interceder por conducto de terceros en la discusión sobre los matrimonios entre homosexuales y la posibilidad de que adopten hijos.
Consideró que esa intervención sólo podrá entorpecer el debate, pero no frenarlo, porque ahora la diferencia con otras iniciativas, como la aprobada en la Ciudad de México, es que fue presentada por el Ejecutivo federal.
No creo que pueda (la Iglesia católica) hacer gran presión, ya no estamos en tiempos para eso. Me parece que la jerarquía puede tener una voz de presión importante ante ciertos grupos de élite de poder o de derecha conservadora instalados en instancias políticas, y entonces pueden trabar un poco la lucha de legisladores, a los que pueden utilizar como arietes.
Destacó que existe mucha conciencia en la ciudadanía y en diversos sectores políticos sobre la importancia del respeto al Estado laico, lo cual debilita la influencia de credos.