Los medicamentos que se utilizan para tratar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) también sirven para niños y adolescentes con obesidad y otros males.

Los jefes de Neurología e Imagenología del Hospital Infantil de México Federico Gómez encontraron que los circuitos neuronales alterados en el TDA también lo están en individuos obesos, con trastornos del sueño, problemas de lenguaje, conducta y talla baja.

Esos circuitos que van del cerebelo a la zona prefrontal del cerebro aparecen apagados en imágenes de resonancia magnética. En cambio, en pequeños sin ninguna patología, esos mismos tractos neuronales se ven iluminados y con una velocidad menor en los conductos.

En esa área del cerebro se procesan los impulsos, por lo que según el jefe de Neurología del nosocomio, Javier Barragán Pérez, niños y adolescentes con esta falla no pueden, aunque lo intenten, moderar su consumo de comida.

Los niños con esos trastornos tampoco resolverán estos problemas por sí solos. Necesitan del tratamiento farmacológico del TDAH, explicó el experto.

Señaló que estas alteraciones pueden ser resultado de mutaciones genéticas que en el desarrollo del cerebro se expresan en deficiencias en el control de impulsos. Entonces, apuntó, por más esfuerzos que hagan los padres con hijos obesos por controlar los alimentos, no servirán de nada.