La barricada permancerá hasta abrogar la reforma educativa, anuncian
Domingo 24 de julio de 2016, p. 9
Juchitán, Oax.
Una brigada de 40 estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) arribó a Juchitán procedente de la Ciudad de México, con víveres para profesores y activistas de organizaciones solidarias que desde hace 38 días bloquean un tramo de la carretera federal Panamericana 180, cerca del canal de riego 33.
La Caravana Solidaria por la Libertad y Autonomía México-Juchitán, integrada por el colectivo Chichiltlahtolli y el Consejo Indígena de Xochicuautla, arribó a Radio Totopo, emisora indígena, desde donde anunció que se integrará a la barricada cultural durante cuatro días.
Los jóvenes fueron recibidos por integrantes de la Asamblea Popular del Pueblo Juchiteco (APPJ), quienes les agradecieron la solidaridad. Les compartirán sus conocimientos de medicina tradicional y primeros auxilios; también llevarán cine independiente al punto del bloqueo.
Christopher, alumno de la UAM Iztalapalapa, subrayó que hace algunos años tienen amistad con integrantes de Radio Totopo. Ellos van a la Ciudad de México y nosotros ahora estamos en Juchitán
para compartir el guendaliza, que significa hermandad y ayuda mutua.
Raymundo Regalado Jiménez, vocero de la APPJ y de Radio Totopo, reiteró que la barricada se mantendrá por tiempo indefinido porque no se ha logrado nada, tenemos paisanos dirigentes encerrados en el penal de Miahuatlán y es necesario seguir luchando por la abrogación de la reforma educativa y por justicia para los caídos de Nochixtlán
.
Lamentó que algunos profesores cobren sus quincenas y no acudan a la barricada cultural; los invitó a unirse a la lucha contra las reformas estructurales. Pidió a los representantes de la sección 22 de la CNTE que nos mantengan al tanto de las negociaciones
con las autoridades.
Advirtió que no entregarán a los dueños ninguno de los tres autobuses que mantienen retenidos porque no hay solución al conflicto magisterial.
La tarde del viernes, una grúa particular levantó los esqueletos calcinados de dos unidades de la línea Sur que los manifestantes quemaron el pasado 19 de junio, con los cuales reforzaron el bloqueo carretero.