Miércoles 14 de septiembre de 2016, p. 5
El recorte en el presupuesto para el gasto federal del próximo año propuesto por el Ejecutivo asciende a 239 mil millones de pesos. Esa cifra es equivalente a seis años de presupuesto para la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) –que este año recibió recursos públicos por poco más de 35 mil millones– o para financiar becas a las siguientes 133 generaciones de nuevo ingreso al posgrado en esa casa de estudios.
Así se informó durante la mesa de discusión En defensa de la educación pública, organizada por la agrupación Redes Universitarias, que se efectuó ayer en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) de la Universidad Nacional, en la que participaron destacados académicos especialistas en temas educativos.
Amparo Ruiz del Castillo, experta en sociología de la educación de la FCPS, aseveró que el recorte afecta a todo el gasto dirigido al sector social e implica sobre todo ‘‘la privatización de la educación pública’’, pues se da mayor posibilidad de que los centros particulares aprovechen para hacer negocio.
Resaltó que los ajustes perjudican a sectores estratégicos como educación, que en 2017 recibiría 265 mil 704.2 millones de pesos, 10.6 por ciento menos que para el ejercicio presupuestal de este año; a cultura, con 30.7 por ciento menos, pues se le asignarían 10 mil 928 millones; al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), al que se propone otorgar 26 mil 963.5 millones de pesos, 23.3 por ciento a la baja; salud, con 121 mil 817.5 millones, 10.8 menor que para 2016, y agricultura, que ejercería 29 por ciento menos recursos que este año.
Enfatizó que el presupuesto 2017 plantea incrementar 9.6 por ciento los recursos para los poderes Legislativo y Judicial, además de que el pago para los intereses de la deuda externa crece en 12.1 por ciento con respecto a 2016. ‘‘Es la cifra más elevada desde 2001’’.
Subrayó que los recursos para estos tres rubros sumarían un billón 339 mil millones de pesos. ‘‘¿Qué podríamos hacer con esa cifra en materia educativa, en ciencia y tecnología o en salud? Son oportunidades de vida, de futuro del país’’.
Jorge Martínez Stach, asesor de la Dirección General de Evaluación Institucional, aseveró que se requiere de más presupuesto para las universidades públicas, aunque afirmó que en el caso de la UNAM, ‘‘si bien es cierto que ni un peso atrás, deberíamos preguntar si un peso adelante, pues primero hay que revisar cómo se distribuyen los recursos en la institución’’.
Enrique de la Garza Toledo, investigador del Departamento de Sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana, dijo que el próximo año será uno de los peores que tendrá México desde los años 90, no sólo en términos económicos, sino laborales.