Durante el tercer trimestre del año la producción de gasolinas en Petróleos Méxicanos cayó 22.4 por ciento, mientras estas importaciones se incrementaron 23.9 por ciento, y su venta en territorio mexicano representó ingresos para la petrolera por 86 mil 855 millones de pesos, que equivalen a una contracción de 16.8 por ciento en comparación con el mismo trimestre de 2015.

De acuerdo con el último informe financiero de Pemex, entre julio y septiembre de 2016 su producción de petrolíferos cayó 20.5 por ciento en comparación con la obtenida en el mismo periodo de 2015, al ubicarse en 895 mil barriles diarios.

La empresa registró un descenso en la producción de todos los petrolíferos considerados en este segmento, por lo que en la producción de gasolinas automotrices la caída fue de 22.4 por ciento, en combustóleo de 13.2, en diésel de 30.2, gas LP 49.8 por ciento, y la de turbosina 11.3 por ciento.

La empresa indicó que esta baja en la producción de petrolíferos fue resultado de una contracción de 20 por ciento en el proceso total de crudo, sobre todo en las refinerías de Cadereyta y Madero.

Atribuyó el descenso de la producción en esas dos refinerías a paros no programados y fallas en servicios auxiliares, trabajos de mantenimiento y elevados inventarios de productos intermedios.

Asimismo, dijo que la proporción de crudo pesado en el proceso de petróleo del Sistema Nacional de Refinación disminuyó 3.2 por ciento, debido al ciclo de mantenimiento programado de las plantas y a paros no previstos en las refinerías reconfiguradas.

Otro factor en contra fue que la capacidad utilizada de destilación primaria bajó 12.9 por ciento debido a las razones que privaron en Madero y Cadereyta.

La empresa detalló que el margen variable de refinación también enfrentó una reducción, al pasar de 1.14 dólares por barril a dos dólares, como resultado de la baja en el rendimiento de gasolinas y destilados del Sistema Nacional de Refinación.