Los Ángeles.

Leonard Cohen falleció mientras dormía, luego de sufrir una caída a mitad de la noche en su residencia de Los Ángeles, informó el miércoles su representante.

Su muerte fue repentina, inesperada y pacífica, dijo Robert B. Kory, su mánager, en un comunicado. Los detalles dados a conocer por Kory ofrecen los primeros indicios del deceso. Durante el anuncio inicial de la semana pasada no se reveló la causa de la muerte.

El documento señala que el cantante y poeta murió el 7 de noviembre, tres días antes de que se diera a conocer la noticia.

El cantautor de melodías como Hallelujah y Suzanne murió a los 82 años de edad. La salud de Cohen había empeorado durante gran parte del año, aunque reveló pocos detalles sobre la naturaleza de sus malestares.

El comunicado dice que a Cohen le sobreviven sus hijos, Adam y Lorca, y sus tres nietos, Cassius, Viva y Lyon. Fue enterrado en una pequeña ceremonia realizada en Montreal el 10 de noviembre, el mismo día del anuncio de su fallecimiento.

Con tan sólo su familia inmediata y algunos amigos de toda la vida presentes, fue enterrado en un sencillo féretro junto a su madre y su padre, escribió Adam Cohen en un comunicado la semana pasada.

Los representantes señalan que se planea la realización de un tributo en Los Ángeles.

Cohen dejó en su mesa muchos proyectos en los que nunca dejó de trabajar: un nuevo libro de poemas, un disco con arreglos para orquesta de cuerdas de sus obras clásicas, y el deseo de continuar su gira de conciertos.

En el disco D´Artagnan, es decir, el cuarto de su trilogía póstuma (Old Ideas, Popular Problems y la despedida: You want it darker), llamado acertadamente Can’t Forget, dejó incrustadas, fiel a su costumbre, muchas claves e inicia con su sentido de autoironía fantástico: Field Commander Cohen, se titula, y canta, como le enseñó Lorca: Oh my love, oh my love, oh my love...