Acapulco, Gro.

En 21 años de existencia, el sistema de seguridad y justicia ciudadana ha mostrado resultados, expresaron los dirigentes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), Juan Horta Cruz y Sabás Aburto Espinobarro, en la presentación de su libro El origen de la policía comunitaria; Montaña y Costa Chica de Guerrero.

La obra consta de 405 páginas y se divide en seis partes; por motivos de seguridad –expresaron– no se dio a conocer el nombre de la editorial que la produjo. En cambio, resaltaron que la obra recoge las costumbres de los pueblos originarios.

Entre los logros de funcionamiento de la policía comunitaria los autores resaltaron el desmantelamiento de tres bandas, la desaparición de la policía estatal motorizada, la obtención de equipamiento, y los primeros operativos efectuados contra el abigeato y asesinatos.

Destacaron la organización de asambleas y la estructura de funcionamiento en las comunidades, a través de las cuales toman decisiones.

Entre los retos que se plantean, están la defensa del sistema de reducación, lograr la eficacia de seguridad y justicia contra amenazas externas, al recordar que en el derecho positivo se habla de penas y castigos, cuando los sistemas de reinserción social no han cumplido con su cometido.

Aburto Espinobarro criticó que no se ve para cuándo va parar la inseguridad, ¿cómo va a ser posible que la gente no se movilice? Si no puede el gobierno, ¿quién? ¿Debemos esperar a que venga Trump?, cuestionó.

En la presentación efectuada este viernes en el fuerte de San Diego, el catedrático de la unidad académica de Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Guerrero, Uriel Leal Ramírez, resaltó que, a diferencia de otras investigaciones, la obra tiene el mérito de haberse hecho de manera directa.

Subrayó que el libro señala que el problema de inseguridad pública tiene solución, un tema que parece que llegó para quedarse sin importar que recursos destinados por el Estado siguen en aumento, y enfatizó que no se trata de un sistema de seguridad, sino también de gestión y desarrollo.

Leal Ramírez resaltó que el Estado nunca ha visto con buenos ojos a la policía comunitaria, ha habido relaciones muy álgidas, muy tensas, aunque ha habido momentos en que ha reconocido su eficacia.

Indicó que sigue avanzando el proyecto alternativo de seguridad pública, no obstante la persecución y hasta asesinato de varios integrantes de la CRAC-PC.