Para que la ciencia, la tecnología y la innovación se fortalezcan en México es crucial que la iniciativa privada colabore de forma más decidida en esta tarea, pero no lo hace debido a que sigue considerando a este rubro como un gasto complejo e innecesario y no como una inversión, advirtieron los dirigentes del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCT).

Al brindar su segundo informe anual de actividades como director del Foro, el astrofísico José Franco lamentó que en el presupuesto del año entrante las instituciones encargadas del desarrollo científico hayan sufrido un recorte de 10 por ciento, y el del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, incluso, 23 por ciento, pero indicó que eso no tendría por qué significar que este rubro se detengan, si los empresarios se decidieran a financiarlo.

En las economías del mundo, los presupuestos de ciencia y tecnología tienen el componente principal del sector privado. En algunas naciones, 80 por ciento llega a ser del sector privado, y en México la participación (de los empresarios) es pequeñita, apenas de 20 por ciento. Debemos tratar de que se estimule y aumente esta participación en un tiempo razonablemente corto, indicó Franco.

De igual manera, señaló que es necesario vincular más a la ciencia y la tecnología con los sectores productivos del país. En Canadá, ejemplificó, existe un proyecto piloto que busca estimular áreas como las matemáticas y las tecnologías de la información, en el contexto de un esquema de colaboración entre el gobierno, la industria y el mundo de la academia.

Por su parte, Joshua Mendoza, vicepresidente de Innovación de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, lamentó que el sector privado aún no se decide a invertir en aspectos como ciencia y tecnología porque no logran verlo como una inversión, sino como un gasto o algo difícil de realizar.

Ante dicho escenario, enfatizó la necesidad de organizar foros de sensibilización dirigidos a empresarios, cuyo objetivo sería convencerlos de la importancia y la necesidad de utilizar parte de sus recursos en la creación de nuevos desarrollos. De lo contrario, los recortes de los fondos públicos seguirán lastrando a la ciencia y la tecnología sin que la iniciativa privada haga una labor de relevo.