Un incremento de 16 por ciento en el precio de los inmuebles en la capital se prevé a partir de este mes, ante el desplome del peso y el alza a la gasolina, lo que será absorbido por el consumidor, afirmó el vicepresidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Alejandro Kuri.

En entrevista, señaló que no se avizora una desaceleración en el mercado, porque existe la demanda, por lo que no se contempla un freno a los proyectos inmobiliarios, sobre todo la construcción de plazas comerciales y corporativos de oficinas, que forman parte del crecimiento de diversas Fibras, que cuentan con el respaldo de inversionistas.

Kuri precisó que la vivienda residencial alta, que en la actualidad oscila entre 60 y 75 mil pesos el metro cuadrado, se moverá a niveles de 80 mil a 85 mil pesos el metro cuadrado, mientras que la media, que está entre 27 mil y 35 mil pesos, alcanzará 40 mil pesos.

Esto se debe al aumento en el cement y la varilla, que se cotizan a precios internacionales, y a los acabados importados, sobre todo cocinas, baños e instalaciones eléctricas. El cemento de enero a diciembre aumentó 18 por ciento y la varilla otro tanto, a lo que se sumó el desplome del peso y el aumento de la gasolina, apuntó.

Indicó que hasta ahora el productor había absorbido estas alzas, pero con toda esta combinación de aumentos forzosamente lo va a trasladar al consumidor.