Río de Janeiro. La justicia de Río anunció ayer que exigirá el rembolso de unos 63 millones de dólares a la empresa Odebrecht y otras que están bajo sospecha de corrupción en la remodelación del estadio Maracaná para el Mundial de Brasil 2014. Los reclamos también están dirigidos hacia siete funcionarios públicos, según comunicó la fiscalía de Río. Las irregularidades fueron detalladas por un programa de televisión de la red Globo, según el cual las empresas facturaron un fuerte sobrecosto por las reformas iniciadas en 2010 para modernizar completamente el estadio antes del Mundial. Los costos totales de la reforma fueron de mil 200 millones de reales (380 millones de dólares), unos 500 millones más de los 700 contemplados por el proyecto, según el programa Fantástico, que citó documentos del Tribunal de Cuentas del estado de Río.