Miércoles 15 de marzo de 2017, p. 8
Estados Unidos está en su derecho de fijar su política migratoria, pero debe hacerlo dentro de los parámetros que marca el derecho internacional en materia de derechos humanos y atención a los refugiados, así como los diversos acuerdos suscritos en el marco de la Organización de Estados Americanos (OEA) y otros foros multilaterales.
Ayer afirmó lo anterior Luis Alfonso de Alba, representante de México ante la OEA, quien recordó que el próximo 21 de marzo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizará una audiencia pública en la que diversas organizaciones documentarán sus preocupaciones sobre las consecuencias que tendrán las órdenes ejecutivas dictadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en materia migratoria.
El diplomático señaló que de las audiencias públicas se derivarán recomendaciones de la comisión para el país del norte. Algunas de ellas serán vinculantes y otras sólo tendrán carácter genérico.
Por ejemplo, si se habla de asuntos relacionados con la Convención sobre Refugiados, hay obligaciones vinculantes para Estados Unidos, porque ratificó dicho documento.
Pero si se aborda la Convención de Trabajadores Migratorios, los compromisos no son vinculantes, porque Washington no ratificó el texto, aunque si está obligado a observar los principios generales del instrumento, explicó el embajador De Alba en entrevista con La Jornada.
Luego de que la víspera se reunió con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, y el secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrao, De Alba señaló que se trabaja con esas instancias para salvaguardar la protección de los indocumentados.
El representante de México manifestó su preocupación acerca de que la política migratoria de Estados Unidos derive en violaciones a los derechos humanos de los paisanos, razón por la cual se dialogó con los directivos de las dos instancias citadas.
Acerca de las diversas acciones que tienen lugar en la OEA y la CIDH, dijo esperar que todos los estados tengan pleno conocimiento de sus obligaciones, lo que tendrá un efecto positivo en la situación de los connacionales.