La llamada Peak TV, o televisión de calidad ha sido muy buena para los espectadores, dicen los escribas de Hollywood, no así para los guionistas. El lunes, el sindicato del ramo de Estados Unidos reanudará las negociaciones contractuales con la Alianza de Productores de Cine y Televisión, que representa a los canales de aire y cable, así como a los estudios de cine.

Ahora que el gremio amenaza con una huelga, Hollywood espera evitar un paro como el de 2007, que duró 100 días, obligó a transmitir viejos capítulos de series en el horario estelar y a demorar el estreno de grandes producciones de cine.

Son varios los asuntos en conflicto, pero el más importante se refiere al panorama cambiante de la televisión.

Que haya más series que nunca –455 en esta temporada, más del doble que hace seis años– puede parecer una bonanza para los guionistas, pero esos seriales generalmente constan de ocho, 10 o 12 episodios en lugar de los tradicionales 22 a 24 por temporada, lo cual les significa una remuneración mucho menor, pues se les paga por episodio.

Hoy día dos tercios de los programas, incluidos algunos de aire, se producen con menos episodios, pero nos siguen pagando por cada uno de estos, dijo el veterano guionista Chris Keyser, representante del sindicato en las negociaciones. “Por ejemplo, yo tengo un programa en Amazon. Trabajaré casi el mismo tiempo que antes –un año– y me pagarán por ocho episodios. Entonces cobré una fracción de lo que me pagaban antes, aunque las productoras ganan el doble... y no soy el único”.

Para este lunes se prevé el inicio de cinco días de negociaciones, después de dos semanas iniciales que culminaron en un impasse y una oferta rechazada por el sindicato. El comité negociador del gremio recomendó que se autorice a llamar a la huelga, secundado por la junta y el consejo del primero. Si no hay acuerdo, se votará sobre si autorizan a los negociadores a llamar a la huelga el 19 de abril. El contrato trienal vigente termina el primero de mayo.

Muchos dudan de que se llegue a la huelga en vista de los acuerdos alcanzados en 2010 y 2013. Aún recuerdan el paro prolongado de 2007 que, se calcula, costó entre mil 500 y 2 mil millones de dólares a la economía de Los Ángeles.

Pero los guionistas, que han visto la caída de sus ganancias a lo largo de la anterior década, están ávidos por recuperar siquiera una parte de lo perdido.