Washington.

El presidente estadunidense, Donald Trump, dijo que habrá sorpresas agradables en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que su gobierno busca concretar con México y Canadá.

El TLCAN es un desastre. Ha sido un desastre. Vamos a tener algunas sorpresas muy agradables para ustedes en el TLCAN, afirmó el mandatario ante directores ejecutivos de algunas de las mayores compañías estadunidenses.

Además de sorpesas placenteras para ustedes respecto del tratado, Trump prometió reducir impuestos y regulaciones.

Trump recibió a los ejecutivos en la Casa Blanca como parte de sus esfuerzos para impulsar su agenda económica y financiera, con quienes compartió algunos de los objetivos de corto plazo.

En el encuentro, al que se permitió el ingreso breve de cámaras de televisión y periodistas, el mandatario reiteró su crítica de que el acuerdo no ha aportado a su país los beneficios anticipados, y por ello la necesidad de renegociarlo.

Tanto México como Canadá esperan a que Estados Unidos defina el curso que quiere perseguir en este proceso, y aunque el jefe de Estado envió ya un borrador de carta al Congreso, la Casa Blanca ha insistido en que aún se trabaja en los términos.

La administración Trump se encuentra ansiosa por iniciar las negociaciones sobre el acuerdo, otras de las promesas de campaña, según el dicho del secretario de Comercio, Wilbur Ross.

Junto a otros funcionarios de la administración, Ross se reunió dos semanas atrás con miembros del Comité de Medios y Arbitrios de ambas cámaras, a quienes entregó el borrador con los objetivos de la renegociación.

Esa reunión y otras de funcionarios forman parte del proceso previo al envío de la notificación formal para el inicio de las renegociaciones del TLCAN, el cual abre un periodo de consultas de 90 días.