Tepeapulco, Hgo.

Los embajadores Ricardo Núñez Muñoz, de Chile, y José Crespo Fernández, de Bolivia, develaron el busto del extinto presidente chileno Salvador Allende Gossens, en sustitución del que fue colocado el 25 de octubre de 1973, 44 días después del golpe militar del 11 de septiembre de ese año.

El primer busto de bronce fue robado en 2008 y el pedestal conservaba la placa conmemorativa.

El embajador chileno agradeció a la clase trabajadora de Hidalgo el busto del depuesto mandatario sudamericano, a quien consideró una de las figuras más emblemáticas del siglo XX.

El acto fue organizado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.

Ante poco más de 200 asistentes, Núñez Muñoz advirtió que el actual contexto internacional es aún más complejo que la guerra fría durante la década de 1970.

“Salvador Allende tuvo que enfrentar la guerra fría, y la confrontación abierta entre la Unión Soviética y Estados Unidos, de la cual fuimos víctimas desde el primer día en que ganamos la elección de 1970”, recordó.

El embajador de Bolivia manifestó que el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 es uno de los episodios más oscuros de la historia de América Latina y es necesario tenerla presente para que no se repita.