La deuda del sector público disiminuyó en 2017 respecto del tamaño de la economía, movimiento que no ocurría en una década, aunque el saldo de esos pasivos es todavía mayor en 10 puntos del producto interno bruto (PIB) respecto del nivel que tenía al inicio del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, de acuerdo con información divulgada anoche por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

En 2017 la reducción de la deuda pública respecto del PIB fue sostenida por el recorte al gasto público, que en particular provocó una contracción de una cuarta parte de un año a otro en la inversión del gobierno federal, indica el Informe sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública, correspondiente al cierre del año, que la SHCP entregó anoche al Congreso.

En diciembre pasado el conjunto de obligaciones, conocido como requerimientos financieros del sector público (RFSP), alcanzó 10 billones 31 mil 652 millones de pesos, cantidad superior en 2.39 por ciento a la registrada al cierre de 2016, informó Hacienda.

Así, el endeudamiento del sector público fue equivalente el año pasado a 46.2 por ciento del PIB. Es un porcentaje menor al reportado en 2016, cuando los RFSP –que incluyen la deuda interna, la externa y el costo de programas de rescate con recursos públicos– representaban 48.7 por ciento del producto interno bruto, establece el documento.

Es la primera vez en una década, de acuerdo con la dependencia, que se registra una disminución de la deuda respecto del tamaño de la economía.

Aun con esa reducción, el conjunto de la deuda pública es superior al del inicio de la administración del presidente Peña Nieto, de acuerdo con los datos de la dependencia.

En diciembre de 2012 el saldo de los RFSP alcanzaba 5 billones 890 mil 846 millones de pesos, cantidad que fue equivalente a 35.8 por ciento del PIB de ese año, según dicha información.

Así, entre el inicio del gobierno actual y el cierre de 2017 el conjunto de obligaciones a cargo del sector públicó creció en 4 billones 140 mil 806 millones de pesos. Ello implica un ritmo de endeudamiento diario de 2 mil 268.9 millones.

Reducción del gasto

En 2017 el gasto programable –que no incluye el destinado al pago de intereses de la deuda o las participaciones– fue de 3 billones 852 mil 330 millones de pesos, cantidad menor en 12.7 por ciento en términos reales, descontado el efecto de la inflación, al de 2016, apuntó la dependencia.

El gasto en inversión física del año pasado fue de 569 mil 277.3 millones de pesos, monto que representó un desplome de 26.3 por ciento en términos reales respecto de 2016, añadió.

Mientras, el gasto de operación, en el cual se incluyen los servicios personales, sumó 1 billón 718 mil 457.4 millones de pesos, contracción de 0.5 por ciento en términos reales en comparación con 2016.

Únicamente hay dos rubros del gasto programable con crecimiento. Uno, el de otros gastos de operación, con un aumento de 3.9 por ciento. Y el destinado al pago de pensiones, que el año pasado requirió recursos por 706 mil 202.2 millones, 2.7 por ciento más, descontado el efecto inflacionario.