Zacatecas, Zac.

El médico Alfredo Garza Bárcena, trabajador de la Secretaría de Salud de Zacatecas desde hace 26 años, y quien fue secuestrado en agosto y enero pasados, aseguró que Miguel Arenas González, director de seguridad pública del municipio de Loreto, y los policías a su mando están coludidos con el crimen organizado.

Garza Bárcena, empleado del hospital regional de Loreto, sostuvo ayer en conferencia de prensa en esta capital que el viernes pasado al mediodía, cuando salió del nosocomio y abordó su camioneta para dirigirse a su casa, fue atacado a balazos por cuatro sicarios, quienes lo hirieron en un brazo y la espalda. El médico llevaba una pistola en su vehículo y enfrentó a los sujetos.

El tiroteo hizo que se movilizaran las policías estatal preventiva y ministerial. A Garza Bárcena se le internó en el hospital donde labora, y pidió al gobernador Alejandro Tello y al presidente Enrique Peña Nieto que respondan ante la crisis de inseguridad en el sureste de Zacatecas donde, aseguró, se han perpetrado más de 500 secuestros.

Hay muchos casos que no se denuncian, desde Loreto al municipio de Pinos. Yo denuncié porque quiero vivir en un Zacatecas diferente, de paz. Quiero ver crecer a mis hijos, dijo.

Alfredo Garza agregó que la segunda ocasión en que fue secuestrado, en enero, fueron policías de Loreto quienes lo entregaron a individuos que lo retuvieron varias horas hasta que agentes ministeriales lo liberaron.

Narró que los agentes secuestradores iban encabezados por el director de la policía municipal, Miguel Arenas. Todos encapuchados, me levantaron por órdenes de un integrante de la delincuencia organizada; me llevaron a la comandancia de policía y ahí dijeron que me iban a entregar al crimen organizado”. Señaló que al cabo de unas horas lo liberaron policías ministeriales.

Sollozando, Garza Bárcena pidió a los ciudadanos que se les quite lo miedoso. Ármense de valor, defiendan su vida y la de sus hijos porque nadie los va a cuidar. Lo más valioso es la vida y nuestros hijos. Quiero paz. Estoy cansado.