Moscú.

Como parte de su campaña para la relección al frente de Rusia y aprovechando las ventajas que no tienen sus rivales nominales, Vladimir Putin intentó convencer a sus compatriotas, y eventuales votantes, de los aciertos de su política exterior, en un documental ad hoc.

Durante hora y media, Putin volvió a referirse a los asuntos más relevantes en los 18 años que ocupa el Kremlin, poniendo especial énfasis en la relación de Rusia con Estados Unidos, así como en los sucesos de Ucrania, la anexión de Crimea y la guerra en Siria.

En esencia, nada nuevo dijo Putin como protagonista del documental Orden mundial 2018, basado en entrevistas realizadas por el periodista Vladimir Soloviov, conductor oficialista de programas informativos en la televisión pública, disponible a partir de este miércoles en las redes sociales rusas y en sitios como YouTube.

En su papel de aspirante a seguir gobernando Rusia, Putin insistió en que no concibe tarea más importante que reforzar la capacidad de respuesta militar del país, porque Rusia enfrenta grandes desafíos al ser una gran potencia y a nadie (en alusión sobre todo a Estados Unidos) le gusta la competencia.

El mandatario ruso sigue creyendo que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no es responsable del deterioro de la relación bilateral y lo ve como rehén de un sistema político decepcionante que se autodestruye.

Afirma que Trump le dejó una buena impresión y confía en que todavía es posible negociar con él, buscar un acuerdo. Al mismo tiempo, sostuvo que es muy difícil interactuar con un sistema como el estadunidense por impredecible.

Procuró aderezar los temas serios de la política mundial con ocurrencias y bromas, por ejemplo, al contar de qué habló con Melania Trump al sentarse junto a ella en la cena del Grupo de los 20 en Hamburgo en julio anterior: “(…) de Siberia y Kamchatka, de osos en Siberia y tigres en el Lejano Oriente, de pesca”.

Y agregó: Cuando uno habla de pesca no puede no exagerar. Reconozco que exageré un poco.

Preguntado en broma si no estaba tratando de reclutarla, el ex agente del KGB respondió: No, hace tiempo que no lo hago, aunque me gustaba mucho hacerlo, fue mi trabajo durante muchos años.

Cuando el entrevistador quiso saber si confía en lo que le dicen otros gobernantes, Putin contestó: Si habláramos de lo que nos dicen las muchachas tendría mis dudas, pero cada país tiene sus intereses y actúa en función de ellos.

Desde la disolución de la Unión Soviética, según Putin, Estados Unidos trata de sacar ventajas unilaterales, muchas veces engañando de modo abierto y burdo al Kremlin como cuando se produjo la reunificación de Alemania y se retiraron las tropas soviéticas y se desintegró el Pacto de Varsovia; cuando incumplió la promesa de no expandir hacia el este la Organización del Tratado del Atlántico Norte; cuando intentó romper el equilibrio estratégico al abandonar el tratado de desarme ABM; cuando se inmiscuyó en los acontecimientos de Ucrania al pedir a Rusia que influyera en el entonces presidente Viktor Yanukovich para no lanzar el ejército contra los opositores; entre otros ejemplos.

Putin está convencido de que el conflicto del sureste de Ucrania sólo puede resolverse mediante la búsqueda de un arreglo político, considera que la anexión de Crimea se basa en la libre determinación de sus habitantes y la participación rusa en la guerra de Siria se debe a una petición del gobierno legítimo del país árabe.

Y concluye en clave electoral al subrayar que no le importan las críticas y sólo se preocupa por cumplir los intereses de Rusia, los intereses del pueblo.