Mártir de Cuilapan, Gro.

En asamblea, pueblos nahuas acordaron ayer interponer ante la Procuraduría General de la República (PGR) una demanda de acción colectiva contra los responsables de la contaminación del río Balsas, después de que detectaron el cambio de coloración del agua de azul a verde.

Acordaron también exigir a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y a la Secretaría de Salud estatal que informen el motivo de la contaminación que afecta la cuenca desde hace 15 días. A esta última dependencia le pidieron sobrevolar el cauce para identificar de dónde proviene la contaminación.

A la asamblea acudieron autoridades de los poblados de Analco, Ahuetlixpa, Tula del Río, San Agustín Oxtotipan y San Juan Totoncitla, del municipio de Mártir de Cuilapan, así como las autoridades indígenas de Xalitla y San Miguel Tecuiciapa, municipio de Tepecoacuilco de Trujano, y San Francisco Ozomatlán, en Huitzuco.

En la reunión se analizaron cinco puntos: la contaminación del río Balsas, el alto nivel de arsénico en los manantiales de las comunidades, la polución por desechos humanos, la reactivación de la gestión regional y la creación de una policía comunitaria.

Previamente, Melquiades García, presidente del comisariado de los bienes comunales de San Juan Totolcintla, explicó en náhuatl que dos semanas después de que detectaron la contaminación ninguna autoridad nos ha informado qué está pasando, a pesar de que les llevamos las muestras de agua a la Secretaría de Salud estatal.

También se mencionó que desde el 2005 los manantiales que abastecen a varios poblados y desembocan en el Balsas presentan altos niveles de arsénico; además, el drenaje de un poblado desemboca en el río. Agregaron que aunque denunciaron este problema al gobierno del estado, no les han respondido.