Profesores y directores de escuelas de educación básica denunciaron que tras el sismo que afectó este miércoles el centro del país, constatamos nuevamente que la mayoría de los planteles carece de instalaciones seguras, pues prácticamente no existen escaleras de emergencia y los patios y canchas resultan insuficientes para la evacuación de la gente en los salones, a lo cual se suma el temor de alumnos y padres de familia ante nuevos daños en los inmuebles.

Francisco Bravo, director de la escuela primaria Leonardo Bravo, ubicada en la delegación Cuauhtémoc de la capital del país, destacó que es necesario que la Secretaría de Educación Pública garantice no únicamente que se disponga de una infraestructura educativa segura, sino que se cuente con medidas de emergencia que permitan un desalojo oportuno y con riesgo controlado de las aulas por parte de los estudiantes y profesores.

Indicó que en nuestra escuela enfrentamos notorias condiciones de inseguridad, no sólo porque tenemos un edificio de ocho pisos que colinda con nuestro patio escolar, que supuestamente es la zona de seguridad, sino porque al encontrarnos en la esquina de dos avenidas con tráfico vehícular pesado no se ha cumplido con el compromiso del gobierno de Ciudad de México de instalar una protección, pese a que en dos ocasiones ya hemos tenido incidentes graves. Uno de los cuales dejó destruido un salón de clases, luego de que se impactara un trailer.

En tanto, maestros y padres de familia denunciaron condiciones de hacinamiento e inseguridad en aulas prefabricadas instaladas en diversos planteles de la delegación Iztapala, señalaron que tan sólo en la primaria José Palomares Quiroz se reportó por cuarta ocasión el saqueo del plantel. La primera ocasión sustrajeron los ventiladores colocados en las aulas prefabricadas y que supuestamente se ocuparían por poco tiempo y en el cuarto robo se llevaron el material didáctico que ahí se encontraba.

Las condiciones difíciles que existen en los planteles dañados por los sismos de septiembre del año pasado, se agudizan ante la temporada de lluvias, pues se han inundado, y ahora se suman las altas temperaturas, indicaron maestros, quienes señalaron que hay preocupación porque también se redujeron las zonas de seguridad, por lo cual evacuar a todos los alumnos y profesores en tiempo y forma hoy resulta imposible.