Ante la escasez de refinerías y gasoductos en el país, así como el problema creciente del robo de hidrocarburos con tomas clandestinas, el uso de ferrocarriles para trasladar combustibles se ha incrementado de manera importante a partir de la aprobación de la reforma energética y se espera que siga creciendo en los próximos años, indicó el presidente de Kansas City Southern de México (KCSM), José Guillermo Zozaya Délano.

En entrevista, señaló que sólo el año pasado la compañía transportó 5 mil 225 millones de litros de combustibles, 84 por ciento más que en 2016, impulsado por la importación de empresas privadas y Petróleos Mexicanos (Pemex) desde Estados Unidos.

Los ferrocarriles se han convertido en el medio de transporte mucho más seguro, eficiente y competitivo para los combustibles en estos días en todo México, señaló el directivo.

De acuerdo con cifras de la empresa, de enero a mayo de este año, se han transportado 17 trenes unitarios de ExxonMobile y 43 de Pemex Internacional (PMI), sin ningún registro de incidentes o accidentes.

Zozaya explicó que KCSM maneja dos esquemas de servicio de transporte de combustibles por ferrocarril para dos clientes con perfiles diferentes: uno es el tren unitario, en el que las locomotoras sólo transportan carros tanques –que representa aproximadamente 70 por ciento del tráfico de combustible que realiza la empresa–, y el esquema manifiesto, que son carros que pueden pegarse al servicio.

En el primer esquema se trasladan los combustibles desde el punto de origen hasta su destino en una sola exhibición y pueden moverse de manera óptima entre 90 y 96 carros cargados por viaje.

ExxonMobile y PMI son los principales clientes de la modalidad de trenes unitarios. En México, los principales destinos de este servicio han sido San Luis Potosí, San José Iturbide (Guanajuato) y Tula (Hidalgo).

En esquema manifiesto se puede documentar un número variado (desde dos, cinco y 15 hasta 30) de carros tanques; KCSM tiene entre 30 y 50 clientes distintos. Los destinos en este caso son Monterrey, San Luis Potosí, Tula y Querétaro, entre otros.

El funcionario explicó que los trenes unitarios no hacen paradas y tienen prioridad de paso por transportar material peligroso, lo que reduce el riesgo de ataques o accidentes.

Además, por regulación, KCSM no puede tener detenidos en sus vías trenes cargados con combustibles, por lo que se les permite pasar antes que a otros carros, como parte de un protocolo de seguridad que aplica la empresa para mover en una sola exhibición gran cantidad de material peligroso.

Ante dichas ventajas, los datos de la empresa indican que el crecimiento del transporte para gasolinas y diesel el año pasado fue de 50 y 72 por ciento, respectivamente, comparado con 2016. El principal aumento se dio en el transporte del gas LP, que registró un alza de 716 por ciento derivado de la liberación de precios de los combustibles.

El año pasado, la empresa invirtió 45 millones de dólares en una terminal de almacenamiento en San Luis Potosí, mediante una empresa conjunta con Watco Companies y WTC Industrial, lo que le permite traer los energéticos desde Texas en trenes unitarios y llevarlos hacia el centro del país, con lo cual esperan facilitar y expandir la exportación de combustibles líquidos de Estados Unidos a México.

Además, KCSM formará parte del proyecto de Avant Energy, anunciado a principios de 2018, en el que con una inversión de 260 millones de dólares se construirá una red de terminales para suministrar productos refinados de petróleo desde el puerto de Altamira, Tamaulipas, hacia la región del Bajío, llamada Suministro de Petrolíferos Altamira-Bajío (Supera).