La adopción previa del Pacto Mundial sobre Migración por los países de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) es la puerta a un nuevo y mejor entendimiento del fenómeno, basado no en demagogias, sino en datos y evidencia, de acuerdo con el embajador Juan José Gómez Camacho, representante permanente de México ante el organismo multilateral.

‘Tras dos años de negociaciones, encabezadas por México y Suiza, los estados miembro de la ONU aprobarán este viernes en Nueva York el borrador final del instrumento que, a decir del diplomático mexicano, proveerá de gobernanza global al fenómeno migratorio.

Este mecanismo será adoptado oficialmente en la Conferencia Mundial de la Migración, que se llevará a cabo en Marruecos el 10 y 11 de diciembre próximos. Sin embargo, el texto quedará listo hoy.

El pacto, dijo Gómez Camacho en entrevista, genera un compromiso firme sobre 23 objetivos puntuales que permitirán hacer que la migración sea ordenada, segura y regular.

Es crucial que los desafíos y oportunidades de la migración internacional nos unan, en lugar de dividirnos. Este pacto mundial establece nuestra comprensión común, responsabilidades compartidas y unidad de propósitos con respecto a ese fenómeno, haciendo que funcione para todos, se lee en el borrador negociado por el embajador Gómez Camacho y su homólogo suizo, Jürg Lauber.

El diplomático apuntó que la migración era el único tema global que no contaba con un acuerdo colectivo y, si bien no es jurídicamente vinculante, sí genera compromisos. Además, señaló, el proceso de negociación de este instrumento fue consensual y se construyó mediante la negociación.

En relación con la ausencia de Estados Unidos en las discusiones, apuntó que el país vecino puede incorporarse, si así lo decide, antes o después de la cumbre de Marruecos. “El acuerdo no impone políticas (…) ofrece soluciones de política migratoria” que hacen sentido, dijo.

Tiene una fuerte dimensión humana, inherente a la experiencia migratoria en sí. Promueve el bienestar de los migrantes y los miembros de comunidades en países de origen, tránsito y destino, se lee en el borrador del texto.

Asimismo, el documento establece que este mecanismo está basado en el derecho internacional sobre las garantías fundamentales y defiende el principio de no regresión y no discriminación.

“Al implementar el Pacto Mundial, garantizamos el respeto, protección y cumplimiento efectivo de los derechos humanos de todos los migrantes, independientemente de su estatus legal (…). También reafirmamos el compromiso de eliminar todas las formas de discriminación, incluidos racismo, xenofobia e intolerancia contra los indocumentados y sus familias”, señala el texto.