El PRD tendrá que renovarse, transformarse e incluso cambiar de siglas para dar cabida a los nuevos liderazgos políticos que se encuentran en el interior del país. Manuel Granados, presidente nacional del PRD, reconoció que las tribus ya no garantizan triunfos electorales, por lo que su partido tendrá que replantear la existencia de esos grupos.

Hay necesidad profunda de entrar a la revisión de nuestro sistema político. En el caso del PRD tenemos un partido resultado de un proceso democrático, tenemos que reconocer las fallas que ha cometido el PRD y resaltar los aciertos. Que haya un inminente cambio generacional.

–¿Las corrientes, las tribus es el capital político para renovarse?

–Tiene que haber una alto en el camino, vamos a entrar a un amplio proceso de reflexión donde se ponga en la mesa nuevas reglas, la conveniencia de un relevo generacional, encontrar la reconciliación ciudadana.

–Los liderazgos históricos en el PRD son los que mantienen las clientelas: ¿hay un reclamo para que estos grupos caciquiles se hagan a un lado?

–Tenemos que entrar a revisar las reglas. Hoy tenemos que entrar a la revisión de las reglas que han dado las corrientes internas del PRD. No podemos privilegiar los individualismos.

–Están Los Chuchos, ADN, Foro Nuevo Sol; esos grupos se apoderaron del PRD, perdieron la cercanía con la sociedad.

–Hay que hacer una reconciliación ciudadana, social con la militancia, con los liderazgos locales. Deberá haber una revisión de las reglas internas. Es el momento para generar una nueva visión.

–Ahora entre la cúpula se advierte que Los Chuchos están llevando al fracaso al PRD…

–Lo que se debe anteponer es la fortaleza del PRD. Ese tema se tiene que poner en la mesa. Qué papel jugarán las expresiones dentro del PRD, eso va estar en la mesa de discusión, privilegiando el respeto, pero el respeto a los liderazgos políticos debe privilegiarse.

–El PRD como PRD o como un nuevo partido…

–Ha llegado el momento de hacer un corte de caja, de reconocer los errores y hacia delante el PRD debe saber si las siglas, si los emblemas serán los mismos o si hay una convocatoria para una refundación.

–¿Qué les dejó esta sociedad con el PAN, el partido acompañante del neoliberalismo priísta?

–Yo llegué a ejecutar lo que ya estaba decidido. Va a ser un tema de reflexión, de análisis. No dudo que haya tenido beneficios, no dudo que haya habido confusión electoral. El PRD es colegiado, se tomó la decisión de ir con el PAN: electoralmente es válido, donde no perdiera el PRD la autonomía de sus banderas y de su esquema de participación ideológica. En dos tercios del país no tuvimos candidatos propios. Finalmente es política. Bien que mal tenemos que revisar.

–¿Pero más mal que bien?

–Tenemos que revisarlo y tomar decisiones.

No se eliminaron vicios internos añejos

El PRD prácticamente es una entelequia, consideró ayer René Arce, al criticar que los dirigentes de este instituto político se hayan dedicado a distribuirse los cargos tras la salida de Andrés Manuel Obrador, en lugar de promover la discusión política y teorizar sobre las condiciones en que se encontraba el país.

Al participar en un foro de análisis sobre los magros resultados electorales que obtuvo el perredismo el primero de julio pasado, que organizó el grupo de Los Galileos, expuso que el PRD nunca fue un partido, pues no construyó las estructuras institucionales que le hubieran permitido cortar los vicios internos.

Por su lado, Miguel Alonso Raya expuso que esta fuerza política no puede continuar como está, pues de seguir así, se dirige a la extinción. Se requiere una transformación profunda, incluso un cambio de nombre y de diseño, pues un partido tribal no tiene viabilidad, puntualizó.

El dirigente dijo que tampoco tiene viabilidad el ser oposición a ultranza de López Obrador, sobre todo porque el PRD contribuyó a lo que sucedió el primero de julio por la lucha que mantuvo durante casi 30 años.