El Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable de la Cámara de Diputados considera que gravar diferentes productos del campo provenientes de Estados Unidos, para hacer frente a los aranceles del acero y aluminio mexicano, repercutirá de manera considerable en los precios de venta a los consumidores en México.

El órgano legislativo advirtió que el precio en las mercancías estadunidenses, al alza, repercutirá en los bolsillos de las familias, hecho que prevé un incremento de la inflación superior a 4.6 por ciento registrado en diciembre pasado. El problema es que 85 por ciento de las importaciones totales provienen de Estados Unidos, de ahí el riesgo de un alza en los alimentos y, en consecuencia, en la inflación.

Agregó que es necesario fortalecer las políticas de fomento productivo para ampliar la oferta nacional de insumos y bienes agropecuarios con el fin de reducir la dependencia de las importaciones agroalimentarias, también destinar mayor presupuesto a la producción y comercialización de estos productos, señala el estudio.

En el análisis Efectos de la aplicación de impuestos a la importación de diversas mercancías provenientes de Estados Unidos, el centro de estudios recomienda fortalecer los instrumentos de defensa de la Procuraduría Federal del Consumidor y reforzar su vigilancia en los precios de los alimentos, insumos, maquinaria y equipo.

El organismo de estudio y análisis del sector rural de la Cámara de Diputados señala que al día de hoy los seis productos agropecuarios de Estados Unidos seleccionados para ser gravados no pagan arancel, por lo que el impacto total estimado en caso de aplicarlo sería de 380 millones de dólares.

Los quesos y el requesón pagarían 96.6 millones de dólares; las piernas y paletas de cerdo, 190.6; embutidos y preparaciones alimenticias, 21.3; las manzanas, 55.3, las uvas 16 y los arándanos 0.2 millones de dólares.

Así, un impuesto a la importación de estas mercancías se trasladaría al precio de venta al comprador, lo cual incidiría en una menor demanda o bien que los productos sean sustituidos por nacionales.

De acuerdo con datos sobre la inflación general del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en la primera quincena de mayo de 2018 los embutidos y preparaciones alimenticias, diversos quesos, piernas y paletas de puerco registraron un incremento anual en sus precios de 5.21 por ciento, cantidad mayor a la inflación general anual, que fue de 4.46 por ciento.