Es loable que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y su equipo reconozcan que México atraviesa por una compleja crisis de seguridad, así como que una de las medidas para explorar alternativas viables para la pacificación y la reconciliación nacional sea realizar consultas entre las víctimas de la violencia y la sociedad civil.

Sin embargo, el concepto de amnistía que impulsa la próximo gobierno federal no debe confundirse con el perdón, pues éste no puede alcanzarse sin verdad, justicia y dignificación de las víctimas, señalaron expertos en trabajar con los agraviados que participan en el Espacio Psicosocial por los Derechos Humanos.

Los especialistas alertaron de que el llamado a las víctimas a perdonar resulta una fuente de sufrimiento emocional adicional en un contexto de impunidad, en el que no saben ni siquiera a quiénes, ni de qué, van a perdonar; además, el mismo representa una invasión al ámbito privado e íntimo y lleva riesgo de estigmatizar a quienes no están de acuerdo con el perdón.

“Durante la historia reciente de México, las víctimas de la violencia de grupos criminales y de violaciones a los derechos humanos han enfrentado impunidad frente a sus demandas de justicia. A su sufrimiento por las pérdidas de personas ejecutadas, las secuelas de la tortura y el dolor por la ausencia de desaparecidos, se suma la estigmatización, la criminalización y otras formas de violencia que derivan de las actuaciones de las autoridades (…) Es por eso que también se ha fracturado la confianza en el Estado y las instituciones”, agregaron.

Restituir la confianza

Consideraron que la nueva administración federal deberá realizar esfuerzos adicionales para reconstruir la confianza de las víctimas que han sido sistemáticamente defraudadas y revictimizadas por las administraciones anteriores.

Esto tiene que ver con el reconocimiento de las organizaciones de víctimas y de la sociedad civil, y sus aportes, así como con metodologías que favorezcan verdaderos espacios de escucha y construcción de consensos, explicaron.

Los especialistas manifestaron preocupación ante la metodología que ha guiado los foros de pacificación (convocados por el equipo de López Obrador), puesto que puede generar la impresión de que se trata de legitimar propuestas establecidas de antemano.

En el Espacio Psicosocial participan, entre otros, Alberto Rodríguez, del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres; Carolina Robledo y Andrea Sánchez, académicas del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social y la Universidad Nacional Autónoma de México, respectivamente, y May-ek Querales, del Grupo de Investigaciones en Antropología Social y Forense.

Aún no hay un análisis profundo de las causas de la violencia y de las violaciones a derechos humanos ni se ha explicado el diagnóstico que fundamenta las propuestas del gobierno entrante, dijeron.