Suman 64 inmuebles hasta ahora: sobse
tiempo récord
Viernes 14 de septiembre de 2018, p. 37
Hasta el día de hoy suman 64 los inmuebles que las autoridades capitalinas han demolido por haber resultado afectados por el sismo del 19 de septiembre del año pasado en las delegaciones Benito Juárez, Coyoacán, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Iztapalapa y Tlalpan, informó la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse).
La dependencia aseguró que están en proceso de demolición cinco inmuebles más, en Paseo de los Laureles número 187, Nicolás San Juan número 30, Doctor Lucio número 102, Viaducto Miguel Alemán número 67 y Avenida México número 105, y están por empezar los trabajos en un predio localizado en Hacienda la Escalera número 5.
Todos estos trabajos se llevan a cabo en medio de fuertes medidas de seguridad con el fin de resguardar la integridad de peatones y automovilistas que circulan cerca de los inmuebles dañados lo que ha permitido desarrollar las demoliciones sin incidentes, añadió.
Un comité de emergencia evalúa el estado de cada inmueble que será demolido –una vez dictaminado– la Sobse analiza el modo en el que será derribado ya que cada uno tiene daños y alturas particulares, así como inmuebles colindantes con características físicas propias.
De manera paralela se analiza topográficamente el edificio a demoler, así como los colindantes, indicó la dependencia.
Este jueves tras cinco días de trabajos, la Sobse concluyó en tiempo récord la demolición de la casa ubicada en Juan de Dios Peza 147, Colonia Obrera, delegación Cuauhtémoc, afectada por el movimiento telúrico
.
El inmueble consistía en una vivienda de un nivel con dos cuartos, que sufrió fisuras y agrietamientos en sus muros, dejando expuesto el acero de refuerzo, así como daños en su techo.
Los trabajos se realizaron de forma mixta, es decir, manualmente, con ayuda de una cuadrilla de demoledores, y mecánica, con una retroexcavadora, garantizando de esta manera la seguridad de los predios colindantes. Los demoledores participaron con el clareo de techo y retirando los muros colindantes, para evitar dañar las edificaciones aledañas se apoyaron con marros, picos y palas, mientras que la retroexcavadora demolía el resto de la construcción a nivel de piso.
En total se retiraron 150 metros cúbicos de escombro; tras concluir la demolición se colocó un tapial para resguardar el predio, y así ser entregado a su propietario para iniciar su proceso de reconstrucción.