Se debilita a categoría 2
Un millón 700 mil personas están en albergues
Viernes 14 de septiembre de 2018, p. 30
Wilmington, Carolina del norte. Las bandas exteriores con vientos de 155 kilómetros por hora del debilitado, pero aún mortífero huracán Florence comenzaron a azotar ayer por la tarde la costa este de Estados Unidos. Aunque redujo su categoría de 4 a 2, los meteorólogos dijeron que la probabilidad de estacionarse en la zona por varios días eleva el riesgo de crecidas de agua por las lluvias torrenciales.
Se espera que el vórtice de Florence toque este viernes la costa sur de Carolina del Norte y se desplace hacia el suroeste al siguiente día, donde podría estancarse hasta por una semana, indicó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
Añadió que este fenómeno podría provocar inundaciones hasta de un metro y fuerte oleaje.
Los vientos bajaron de 225 a 155 kilómetros por hora durante la madrugada de este jueves, por lo que su categoría pasó de 4 a 2, con base en la escala Saffir-Simpson.
Por la tarde, el vórtice se ubicaba a 160 kilómetros de Wilmington, Carolina del Norte, y a 250 de Myrtle Beach, Carolina del Sur, mientras avanza a una velocidad de siete kilómetros por hora.
El NHC también apuntó que los vientos huracanados se extienden en 130 kilómetros, y los que tienen fuerza de tormenta tropical se perciben a 315 kilómetros.
El tema aquí es el tamaño de la tormenta. Entre más grande y lenta sea, mayor serán la amenaza y el impacto
, comentó Ken Graham, director del NHC.
Las autoridades dijeron que un millón 700 mil personas ya fueron desalojadas de las Carolinas y Virginia e instaladas en albergues.
La oficina de emergencias informó que más de 68 mil personas se quedaron sin servicio de energía eléctrica y detectó algunas inundaciones en Carolina del Norte. La cadena CNN reportó caída de árboles.
En la costa de Virginia y Carolina del Sur medios locales reportaron inundaciones. El cierre de escuelas y negocios se extendió hasta Georgia y las aerolíneas han cancelado al menos mil 200 vuelos.
Las autoridades estimaron que unos 10 millones de personas podrían ser afectados por el huracán.
Las cadenas de materiales de construcción Home Depot y Lowe activaron centros de respuesta para abastecer sus tiendas antes y después del paso de la tormenta.
A medida que Florence se acercaba, el presidente Donald Trump y las autoridades locales apremiaron a los residentes que se encuentran en la trayectoria del huracán a salir de sus casas.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, advirtió que el huracán no fue invitado, pero está aquí de todas formas. Mi mensaje hoy: No se relajen. Estén alertas. Esta es una tormenta poderosa que puede matar
.
A su vez, Trump tuiteó: “Estamos completamente listos para el huracán Florence, a medida que la tormenta se vuelve más potente. ¡Sean cautelosos! Es imperativo que todos sigan las órdenes locales de evacuación”, alertó.
El presidente elogió desde la Casa Blanca todas las medidas preventivas del gobierno y pidió a la población que se aleje de la ruta de Florence.
Este es el primer huracán que representa un peligro inminente, de los cinco que se han formado en esta temporada en el Atlántico.
El meteoro será una prueba para el gobierno de Trump, a menos de dos meses de las elecciones legislativas que determinarán el control del Congreso. Luego de las críticas por su respuesta en Puerto Rico tras el paso del huracán María el año pasado, Trump prometió una sólida respuesta frente a Florence.
Explosiones en Massachusetts
Equipos de emergencia acudieron a atender 70 explosiones de gas que han dejado seis heridos y daños materiales en tres comunidades en el norte de Boston. Hay entre 20 y 25 casas en llamas en Lawrence, informó el jefe de policía de Methuen, Joseph Solomon. Hay tantos incendios que ni siquiera puedes ver el cielo
, dijo Solomon desde Lawrence. El periódico Eagle-Tribune, de North Andover, reportó que al menos una casa quedó destruida y varias más se incendiaron debido a un problema con la tubería que provee de gas a las casas en Andover, North Andover y Lawrence. La policía estatal de Massachusetts dijo que soldados acuden al lugar para resguardar la zona, pues cientos de vecinos fueron desalojados.