Integrantes del Observatorio Ciudadano de Coyoacán –que agrupa a intelectuales, artistas, académicos y periodistas– manifestaron su rotundo rechazo a la continuación de las obras del Nuevo Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (NAICM) sobre el Lago de Texcoco porque, señalaron, implica un altísimo riesgo para la población e infraestructura de la capital y responde a intereses económicos para ciertos empresarios, ya que está en puerta un proyecto inmobiliario de más de 200 mil millones de dólares.

También hicieron un enérgico llamado a la comunidad artística, académica, y a la sociedad en general a participar en la consulta ciudadana del próximo 28 de octubre para echar abajo el megaproyecto y así derrotar a la oligarquía tramposa que sólo le interesa el dinero. Participemos de manera masiva para decir ¡No! al NAICM. Defendamos nuestra ciudad capital y nuestro histórico lago.

El escritor y periodista Guillermo Zamora; Leopoldo Rodarte, experto en temas hidráulicos y ex director de Aguas en Ciudad de México; el sociólogo Armando Bartra, y el ingeniero civil Héctor Balbuena, especialista en el tema, ofrecieron una conferencia de prensa para hablar de los daños socioambientales y riesgos que ocasiona la construcción de la nueva terminal aérea.

Consideraron que la edificación de la obra faraónica y con un gasto extraordinariamente alto, no ha sido con la finalidad de buscar una alternativa viable y con un proyecto bien estudiado que ayude a las dificultades de saturación aérea que tiene el actual aeropuerto.

Enormes recursos

Recordaron que el costo inicial de la megaobra fue de 160 mil millones de pesos, y en la actualidad llevan invertidos aproximadamente 285 mil milllones. Los expertos señalan que “al final esa cantidad puede elevarse hasta 400 mil o 500 mil millones de pesos.

“De llevarse a cabo el proyecto, tendrá consecuencias desastrosas para el propio aeropuerto, para Ciudad de México y habitantes de zonas aledañas, ya que se ha comprobado que el terreno es sumamente malo para la construcción de este tipo; la tierra es de muy mala calidad, con arenas muy compactables que se mueven diferencialmente.

A todo lo anterior, añadieron, hay que sumarle lo que representaría la ciudad que quieren construir a sus alrededores “un grupo de empresarios sólo interesados en hacer negocios al amparo del aeropuerto.

Aseguraron que la operación simultánea del actual aeropuerto y la Base Aérea de Santa Lucía es viable, contrario a lo que dicen otros estudios y especialistas. Esos aeropuertos operando mutuamente llevan más de 40 años y no ha habido ningún percance en ese espacio aéreo. Algunos se basan en un dictamen que circula de Mitre, cuyo director es un mexicano que tiene relaciones comerciales con empresarios que están metidos en la construcción del NAICM.