El próximo lunes habitantes de la delegación Coyoacán solicitarán de forma personal una auditoría a los gobiernos delegacionales de Mauricio Toledo y Valentín Maldonado ante la Contraloría General del Gobierno de la Ciudad de México por presuntos actos de corrupción que, aseguraron, se cometieron durante estas administraciones perredistas.

Los residentes expusieron que el nuevo gobierno debe poner mayor atención a esa demarcación, donde la corrupción es un tema público, debido a las denuncias divulgadas. Además de la compra de votos y condicionamiento de programas sociales que permitieron al PRD mantener la administración, ahora encabezada por Manuel Negrete.

Desde hace ya varias semanas, mediante la plataforma internacional change.org se solicitó a los ciudadanos respaldar la petición, promovida por los vecinos de la populosa zona de los Pedregales, para intentar romper el hilo de corrupción a la cual se vieron sometidos los más de 600 mil habitantes de Coyoacán durante seis años.

En el referido periodo, expusieron que el también legislador del sol azteca, Mauricio Toledo, impuso un patrón de violaciones flagrantes a los derechos de los habitantes de las zonas de mayor carencia de recursos y servicios de Coyoacán.

Los vecinos se han visto impedidos para acceder al servicio de agua potable, que es un recurso básico y derecho humano, por no simpatizar con las políticas clientelares y de sumisión de ambos gobiernos, pese a ser, después de la inseguridad, una de las mayores demandas.

No obstante, los comerciantes también denunciaron casos de extorsión que incluso llevaron a la cárcel al ex secretario particular del entonces jefe delegacional, Mauricio Toledo. Un empresario gasolinero denunció que para abrir su negocio le pidieron a cambio una cantidad. El caso se dirimió en los tribunales y concluyó con la prisión de su hombre de confianza.

El uso político de programas sociales, la venta de espacios públicos, el despojo de terrenos de donación de unidades habitacionales, entre muchos otros actos ilícitos, se volvieron cotidianos entre los coyoacanenses, por ello quieren poner un alto mediante la solicitud a la contraloría para que se revisen los gobiernos y acabe la impunidad.