Diversas organizaciones civiles de apoyo a los migrantes dieron a conocer este sábado un programa para reunificar a integrantes de familias que llevan muchos años sin verse como consecuencia de que alguno de ellos trabaje y viva de forma indocumentada en Estados Unidos y, por tanto, no puedan arriesgarse a salir de aquel país.

Gabriel Larraguivel, presidente de la asociación civil Los Dos Méxicos, explicó que el programa –ya acordado con el gobierno de Estados Unidos– consistirá en llevar cada mes a ese país a por lo menos 100 adultos mayores, quienes llevan una década o más sin ver a sus hijos para que pasen entre tres y cuatro semanas con ellos.

Al término de ese periodo, explicó, todos los visitantes se comprometen a regresar en grupo, y no a hacerlo por separado o a tratar de quedarse en aquel país.

En entrevista con La Jornada, Gabriel Larraguivel dijo que esta iniciativa surgió luego de que las autoridades federales de México nunca atendieron la petición de las organizaciones de familiares de migrantes de crear un programa de reunificación temporal de este tipo.

Los gobiernos de cinco o seis estados sí lo hacen, pero sólo atienden a sus paisanos. Por eso, en lugar de estar insistiendo con las autoridades, decidimos hacerlo nosotros mismos y atender a todos, sin importar el estado de origen de los migrantes y sus familias, resaltó.

El activista detalló que, aunque el plan original era llevar sólo a 30 personas a que visitaran a sus familiares en Estados Unidos, debido al nivel de respuesta a la convocatoria que lanzaron las organizaciones civiles a través de las redes sociales, finalmente se espera que cada mes –a partir de enero de 2019– vayan por lo menos 100 personas a aquel país en el marco de este programa.

Visa en el aeropuerto

Tenemos grupos de 85 personas y el problema es incluir a todos en un solo vuelo, por eso tenemos que dividir las reservaciones y tener cuidado de darles la visa en el aeropuerto para tener más control y evitar que las personas beneficiadas por el programa se vayan por su cuenta, indicó Larraguivel.

El activista destacó que trabajar en otro país de forma in­documentada y, por tanto, no poder regresar a tu lugar de origen para visitar a tus seres queridos, genera sentimientos de tristeza que pueden evitarse a través de este tipo de esquemas.