La Organización de las Naciones Unidas (ONU) convocó en Marrakech, Marruecos el 10 y 11 de diciembre a una conferencia intergubernamental para adoptar el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.

Acuerdo que, pese a no ser vinculante y del que varias naciones se han desmarcado, es necesario avalar para dar pasos en la dirección correcta y evitar el sufrimiento y muerte de miles de personas en situación de movilidad, de acuerdo con organismos internacionales y especialistas.

Guerras, violencia y persecución ha desplazado a 68.5 millones de personas en el mundo, según cifras de la ONU.

En Europa se habla de la crisis de refugiados y en América destacan las caravanas de migrantes centroamericanos que transitan por México con destino a Estados Unidos para solicitar asilo.

El pacto busca mejorar la gobernabilidad de la migración y atender el fenómeno de manera holística.

El Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, viajó a Marruecos para participar en la adopción del mecanismo.

El embajador Juan José Gómez Camacho, represente de México ante la ONU que encabezó el proceso de negociación junto a su homólogo suizo, opina que es el acuerdo sobre un enfoque común de la migración internacional en toda su dimensión.

El mecanismo fue acordado por los Estados miembro de la ONU, excepto Estados Unidos, en julio; desde entonces otros países han seguido los pasos del vecino del norte. Entre ellos, Austria, Hungría, Polonia, Estonia, Bulgaria, República Checa, Israel, Australia y República Dominicana.

Al respecto, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, expresó decepción por la salida de estas naciones. Pienso que lo que pasa hoy es que muchos líderes, en lugar de dirigir y dar ejemplo, prefieren mirar las encuestas para ver si la gente teme a la inmigración, indicó.

El oficial para México y Centroamérica del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Alberto Cabezas Talavero, expresó que cada Estado tiene derecho a decidir si firma el acuerdo; sin embargo, este mecanismo será una forma de aliviar el sufrimiento de migrantes e incluso un mecanismo para salvar vidas.

En particular, dijo, el CICR busca poner énfasis a la atención de los migrantes desaparecidos y el trato a los infantes, muchos de los que terminan víctimas del hampa.