Madrid. El Real Madrid recibe este miércoles al Barcelona en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, el cual será el primer encuentro entre los dos grandes clubes del campeonato español que se efectúe esta semana, pues el sábado disputarán el clásico en la liga, que puede decidir gran parte del torneo.

Tras el 1-1 obtenido en el duelo de ida, realizado en el Camp Nou a principios de mes, todas las posibilidades están abiertas, aunque el equipo merengue juega con la pequeña ventaja del gol logrado a domicilio, que le daría el pase a la final en caso de un empate sin tantos hoy en el estadio Santiago Bernabéu.

Es un partido guapísimo, es el gran clásico del futbol español, este encuentro siempre pone a España como capital mundial del futbol, comentó el técnico del conjunto blanco, Santiago Solari, ayer en conferencia de prensa.

Asimismo, descartó que el argentino Lionel Messi asuste a su equipo y al madridismo, y aseguró que la palabra asustar no existe en el mundo del futbol.

Por su parte, Ernesto Valverde, entrenador del Barcelona, reconoció que su equipo acumula una gran trayectoria durante años recientes en el Bernabéu, pero aclaró que no se fija en los precedentes porque no sirven para “saber lo que va a ocurrir en el futuro.

No me fijo en absoluto en los precedentes. Recientemente el Barça ha tenido una gran trayectoria en ese campo, pero nada más. Ellos van a estar bien, fuertes, como estuvieron aquí. Es un clásico y sabemos la importancia que tiene desde todos los puntos de vista. Repasar la estadística no sirve de mucho, de hecho no lo tengo en cuenta, explicó el entrenador azulgrana.

Es un partido señalado, una semifinal, un clásico, y nos gustaría pasar. Sabemos que va a ser complicado. Tenemos un marcador que no es el que nos gustaría, pero la eliminatoria está abierta. Es un partido definitivo, uno de los dos se va a quedar fuera de la final, no es como el de liga que al final todo continúa. Queremos pasar y estamos preparados, agregó.

Asimismo, Valverde aseguró que saldrán a intentar hacer daño al contrario, igual que hacen siempre. Si no marcamos no tenemos posibilidades de pasar, por lo que nuestra obligación es ir a anotar, pero es lo que hacemos siempre, no es ninguna variación, dijo.

Respecto del clásico liguero del sábado, el timonel reconoció que no es normal que se jueguen dos partidos de esta envergadura en una semana. Es difícil que se dé el mismo resultado, generalmente son partidos diferentes, suele suceder. No sé qué puede ocurrir en estos dos. Nuestra intención es separarlo y centrarnos en el de Copa. El partido del sábado nos pilla lejísimos todavía.

Investigan a Ramos

Por otro lado, la UEFA anunció este martes que abrió un expediente al central del Real Madrid Sergio Ramos por recibir una tarjeta amarilla a propósito, durante su partido de ida de octavos de final de la Liga de Campeones de Europa contra el Ajax, y detalló que su caso será tratado el jueves.

El español fue amonestado por una entrada sobre Kasper Dolberg en la victoria 2-1 del cuadro merengue sobre el Ajax, en el duelo celebrado en Ámsterdam el pasado 13 de febrero.

Ramos aseguró el día después del encuentro que no había forzado la tarjeta, pero justo después del partido pareció admitir que había sido amonestado a propósito. La verdad es que dado el resultado estaría mintiendo si dijera que no fue algo que tenía en mente. No se trata de minusvalorar al rival, pero a veces hay que tomar decisiones y eso he hecho, declaró el zaguero.

El Real Madrid disputará el duelo de vuelta de los octavos de final contra el Ajax en el estadio Santiago Bernabéu el 5 de marzo.